Dicen que no hubo tiempo para una marcha blanca porque la gente lo llenó a poco de abrir. Aunque en realidad La Maestranza sí está en rodaje, porque dentro de pocos días ampliarán de 55 a 200 la capacidad de una sandwichería que vino a llenar un espacio en Vitacura. Su estética de corte industrial crea un ambiente sencillo, con un servicio atento y conocedor de la carta, y donde el segmento hamburguesas cuenta —más allá del discurso ético del animal bien criado— con carne de calidad. Una que cumple con la promesa de equilibrarse bien con el resto de los ingredientes, como sus panes aguantadores y salsas con sabores singulares. Su Maestra clásica ($ 6.500) es ejemplo de ello, lo mismo que otra variante: la Hasta el fin del mundo ($ 6.900), con trozos fritos de merluza austral. Buenas cervezas —se echan de menos más variantes— y un entrante digno de consideración: Pulpo a la plancha con chimichurri ($ 4.500).

La Maestranza. Vitacura 5468, Vitacura. Tel. 32235280.