Precio de referencia $ 30.000
Papas brujas, redondas, pequeñas y de violeta intenso; también las de la familia michuñe, que son varias y aportan harto a los sabores que hacen único en el mundo al Chiloé alimentario. Son centenares, con seguridad poco más de 200, las variedades de tubérculos dispersas por el archipiélago, pero aquellas dos variantes son las que Roberto Taverne usa para su vodka, el primero de alta gama hecho en el país. Como suele suceder, para lograr la primera botella de Sirena de Chiloé pasó por varios períodos de pruebas, afinando su receta. “Hay muchas papas que dan malos sabores y aromas que no queríamos. Aparte, el proceso es más complejo respecto a la destilación de granos: procesar el almidón y luego hacer alcohol no es fácil. El asunto es que acá tenemos una variedad enorme de insumos y los ocupamos como si se tratara de un regalo”, dice este ex santiaguino con pasado familiar en la importación de licores y afincado hace seis años en San Pedro, la isla más austral del archipiélago.
En ese largo camino de la destilación que Taverne eligió, conseguir una medalla de bronce en la New York International Spirits Competition el año pasado, ayudó a darle visibilidad a su vodka-boutique, que aún es una rareza en Chile hasta para profesionales. Bien helado, se aprecia lo puro de su alcohol a la vista, junto a su fineza en términos de textura en el paladar, sin perder la intensidad; en ese trayecto va dejando una tenue huella dulce que se mantiene en la boca como un testimonio amable de la papa. Sirena de Chiloé puede beberse solo, de a sorbitos pequeños, apreciando cómo cambia su talante conforme sube su temperatura; o usarse en coctelería de alto nivel, junto a licores y destilados tan nobles como este producto, que se suma a una pequeña pero consistente lista de nuevos destilados nacionales —gin, absenta, whisky—, elaborados bajo procesos artesanales. Hay espíritu en el sur.
Disponible en Chiloé y en Direct Wines Vitacura 3520, Vitacura. Tel. 228405696. Más info en: www.sirenadechiloe.cl