El año pasado la directora de oficinas comerciales de Asia de ProChile, Rose Mary Bedecarratz, decidió hacer un break en su jornada laboral. Bajó los 25 pisos que la separan del lobby de la ShanghaiMart Tower, edificio donde tienen su oficina en China. Mientras fumaba un cigarrillo se puso a conversar con otra ejecutiva que trabajaba en ese edificio y quien sin saberlo era además su vecina de piso. Se trataba de Amy Zhang, CEO de Sky Solar Group, una de las empresas chinas más relevantes de capitales privados de la industria de la energía solar.
La conversación trascurrió con fluidez, sobre todo por el interés de Zhang en saber más sobre Chile. No era la primera vez que la ejecutiva oía hablar del país, pues coincidentemente su compañía estaba analizando arribar con algunos proyectos de generación de energía solar al mercado local. Por eso el enterarse de que sus vecinos eran sus aliados perfectos, fue una buena noticia.
La anécdota es recordada con humor por el director comercial en Shanghái de ProChile, Federico Tabja. Para él esta conversación fue el primer paso del acuerdo que se cerró el pasado martes 26 de junio entre Sky Solar Group, Sigdo Koppers y el gobierno chileno. Todo con el fin de comprometer un desembolso por sobre US$ 1.000 millones para la instalación de plantas solares en el país.
La inversión de Sky Solar es la más grande anunciada en Chile por una empresa china, ya que pese a la vigencia de diferentes tratados comerciales entre ambos países, su relación ha estado adscrita principalmente al intercambio comercial. Hoy el gobierno espera que Sky Solar abra la puerta para profundizar sus lazos con China.
La meta inmediata de las autoridades chilenas -además de triplicar el intercambio comercial de ambos países de aquí a tres años- es que grandes empresas chinas participen como inversionistas en proyectos a nivel local, incluyendo la explotación de litio y la construcción del puente en el canal de Chacao.
La instrucción ya cruzó el Pacífico y en las oficinas de ProChile en Shanghái reconocen que compañías forestales, mineras y de alimentos están analizando su desembarco en Chile. “Lo que más les importa es la credibilidad de las instituciones, sobre todo respecto al riesgo. Los inversionistas chinos quieren invertir en activos físicos y ahí nuestro país resalta respecto a otros”, explica Tabja.
Un negocio “no convencional”
Amy Zhang dista mucho de ser una ejecutiva tradicional. Durante esta semana estuvo en Chile y lejos de la formalidad que caracteriza a sus pares, se desenvolvió espontáneamente con ministros, grandes empresarios y asesores. Esto pese a que en el país ella y su delegación fueron recibidas como invitados de honor.
Zhang explica que casi por dos décadas desarrolló su carrera en grandes multinacionales como Deloitte y Philips, pero que hoy está convencida que la inversión en proyectos de Energías Renovable No Convencionales (ERNC) es un negocio con excelentes dividendos y que crecerá vertiginosamente en Chile, donde la energía es cara y escasa.
Propiedad del empresario chino Su Weili, Sky Solar decidió expandir su negocio en el mundo a partir del año 2005. Weili desarrolló gran parte de su carrera en diferentes posiciones en eléctricas chinas, para luego fundar Sky Solar y centrarse en el negocio fotovoltaico. El modelo fue exitoso y luego de afianzar su presencia en 20 países, optaron por comenzar una nueva conquista.
En 2010 cuando tomaron esta decisión, diferentes comentarios sobre Chile los incentivaron a mirar este mercado como un destino prometedor.
Estas apreciaciones llegaron hasta sus oídos en Madrid donde Sky Solar tiene sus oficinas internacionales. Fue precisamente allí donde se enteraron del potencial de Chile para el desarrollo de las ERNC.
Desde Shanghái, Zhang decidió que era hora de actuar: definió que 2011 sería un año clave para el negocio y que necesitaban buscar un partner chileno que los apoyara en su aterrizaje. “Estamos desarrollando nuevos mercados que incluyen, entre otros, India, Sudáfrica y Latinoamérica, empujada por Chile”, detalla la ejecutiva.
El socio “glocal”
Una vez que se dieron cuenta que Chile contaba con las cualidades necesarias, Sky Solar encargó a dos de sus ejecutivos explorar el mercado. Se trataba de Jaime Gómez, Director de Negocios de América Latina y Mercados Emergentes, y de Hong Chen, gerente de Negocios de la misma división. Su misión: buscar un socio con experiencia en el desarrollo de ERNC y que estuviera dispuesto a apoyar a Sky Solar en la que sería la más grande inversión hecha en Chile en esta industria. “Era necesario para nosotros que el negocio fuera global y local a la vez, es decir ‘glocal”, comenta Chen.
En diciembre pasado Sky Solar y Sigdo Koppers solicitaron los permisos para levantar una planta de generación fotovoltaica en Arica, en la que invertirán US$ 70 millones. Es sólo el principio de un compromiso de inversión a largo plazo.
El grupo Sigdo Koppers, controlado por Juan Eduardo Errázuriz, Naoshi Matsumoto, Mario Santander, Norman Hansen, Horacio Pavez y la familia Aboitiz, asomó como el candidato ideal. “En la industria les hablaron de nosotros y llegaron con esta propuesta que nos pareció muy coherente”, recuerda el gerente general de SK Ecología, Domingo Poblete.
Así, 2011 fue un año de intensas conversaciones entre ambas compañías. A mediados del año pasado, las tratativas se intensificaron y definieron que antes de terminar 2011 su primer proyecto debía estar ingresado al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.
Lo lograron. En diciembre pasado ambas empresas solicitaron los permisos para levantar una planta de generación fotovoltaica en Arica, en la que invertirán US$ 70 millones y la cual ya fue aprobada. Es sólo el principio. El acuerdo firmado el martes no sólo contempla esta iniciativa, sino que implica un compromiso de inversión total que superará los US$ 1.000 millones en Chile, con un portfolio de proyectos que aportarán 300 megawatts al sistema eléctrico en cuatro etapas.
La energía se inyectará al Sistema Interconectado del Norte Grande (SING). La marcha blanca comenzaría en 2012, y la generación intensiva de energía en el año 2013, aunque según los ejecutivos de la firma todo dependerá de cómo avance la tramitación ambiental de sus proyectos.
Sus iniciativas también contribuirán a reducir la emisión de gases tóxicos. El proyecto de Sky Solar en Arica elimina el equivalente a 14.892 toneladas de CO2, mientras la energía que generará es igual a lo que consumen 15.000 habitantes al año.
La semilla
Durante la visita oficial del primer ministro chino a Chile, Wen Jiabao esta semana, el gobierno chileno no escatimó esfuerzos en hacer explícita su invitación a empresas chinas para atraer sus proyectos a Chile. “La inversión directa de China aquí es casi inexistente. Alcanza casi US$ 100 millones desde 1974 e incluso la inversión chilena es más grande en China, llegando a US$ 300 millones”, dijo el canciller Alfredo Moreno en la firma del acuerdo entre las empresas el martes pasado.
Tan concreto es el llamado, que mientras Moreno los “invitó” a participar de la explotación de litio en Chile, el ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, entregó a Wen Jiabao los antecedentes de la licitación para la construcción del puente sobre el canal de Chacao. “El presidente Piñera me pidió que le entregará una carpeta al primer ministroWen Jiabao con los antecedentes de la licitación internacional por el proyecto del puente Chacao. De esta manera les manifestamos nuestro interés para que empresas chinas participen en este proceso”, dijo Golborne en el marco de la visita de las autoridades chinas a La Moneda.
Con todo, Zhang matiza. Asegura que como todos los mercados, el chileno tiene sus complejidades. Entre ellas, la lentitud de algunos procesos de calificación ambiental.
Para el empresario Juan Eduardo Errázuriz, uno de los controladores del grupo SK, la llegada de Sky Solar debe ser vista como la puerta de entrada para concretar otros negocios. “Todo esto toma tiempo, pero permite generar lazos, producir intercambios y eso es un semilla que germina en este tipo de acuerdos”, destaca.
Con el fin de profundizar la relación, entidades financieras chinas también han reforzado su vínculo con Chile. Entre ellas está el Banco de Desarrollo de China, que financia el proyecto de Sky Solar. “Lamentablemente la cooperación económica y comercial entre ambos países está atrasada, aunque ambos gobiernos se están esforzando para mejorarlo”, explica la gerente de Planificación del China Development Bank, Guo Mingshe.
Precisamente los esfuerzos del gobierno chileno apuntan a que en medio de una economía turbulenta, Chile se convierta en un“refugio” que atraiga a los capitales desde Oriente.