Es un miércoles a comienzos de abril. El gran jefe, Richard Branson, el hombre de los 4.200 millones de dólares, está en la casa. El dueño de Virgin Mobile visitaba su oficina chilena y saludaba a todos y a todas de beso, tiraba bromas e incluso se sacaba la camisa. Pero el ambiente festivo no sería eterno.
Porque los primeros meses de Virgin fueron duros. A pesar de la gran inversión en marketing y publicidad, la empresa no lograba resultados positivos. En su primer mes, Virgin sólo logró encantar a 4.152 clientes, mientras que VTR, el otro operador móvil virtual, conseguía 8.727 nuevos abonados, también en su primer mes. Ni hablar de comparar con Claro o Movistar. Pero nadie dijo que el camino sería fácil. “Chile tiene cinco operadores con redes propias, muy competitivos, y ostenta la inversión per cápita más alta en empresas de telecomunicaciones de Latinoamérica”, explica Pablo Bello, ex subsecretario de Telecomunicaciones.
Sin embargo, con los meses el panorama fue mejorando. La estrategia de Virgin por un público específico, que busca mejores precios, fue dando resultado. “El operador móvil virtual apuesta por un servicio de nicho, como en el caso de Virgin, fuertemente enfocado en el público joven y en el consumidor de prepago”, dice Bello.
Los últimos datos de la Subtel, publicados en septiembre, mostraban a Virgin con 66.228 abonados, mientras que su punto de comparación, VTR, lograba 48.466. Nextel, en tanto, cuenta con más de 80 mil, aunque partió antes. Todos ellos siguen estando a años luz de los grandes -Claro sobrepasa los cinco millones de afiliados y tanto Entel como Movistar tienen más de ocho millones-, pero, al parecer, el camino de Virgin, VTR y el futuro de nuevos actores -como Falabella, que comenzaría a operar en 2013- no va por ahí. “Los operadores móviles virtuales en Chile representan el 1% de los usuarios de telefonía móvil”, comenta Bello. “Más que reemplazar a los operadores tradicionales, son un complemento que dinamiza el mercado y abre más alternativas para los consumidores”.