La interrumpida entrevista que José Piñera dio en el programa de TVN, El Informante, dejó varias imágenes que pasarán a la posterioridad y que, incluso, comediantes como Kramer han aprovechado para sus rutinas. Una de ellas, quizás la más recordada, es la del hermano del último presidente de la centro derecha leyendo, una y otra vez, una carta firmada por el gerente general de AFP Hábitat Cristián Rodríguez, donde, según el ex ministro del Trabajo de Pinochet, "Los hombres que han cotizado por 30 años o más, tienen pensiones en promedio superiores a los $ 650.000".
El citado texto, además, contenía las propuestas de la AFP para mejorar el actual sistema, como atrasar la edad de jubilación, subir el tope imponible o aumentar la tasa de cotización obligatoria. Todas estas medidas, según Rodríguez, "no son populares, pero sí políticas públicas responsables y lamentablemente los distintos gobiernos desde esa fecha no han tenido la voluntad política ni la visión para implementarlas". Con esto, Habitat buscaba ser parte de un debate que, según la misma carta, obedece a conceptos ideologizados e intereses particulares".
Luego de eso, vinieron los anuncios en cadena nacional de la presidenta Bachelet que sorprendieron a varios, incluyendo a Habitat. Por lo mismo ayer mandaron una segunda carta a sus afiliados. Esta vez, eso sí, en un tono menos conciliador que la anterior.
"De los mejores existentes"
La carta parte diciendo que las bases del sistema chileno son sólidas y que su estructura está dentro de las mejores existentes. "Es prácticamente igual a la del sistema de Dinamarca, considerado el mejor del mundo", explica.
¿Cuáles serían las diferencias, entonces? Según Habitat, estas radican en que los daneses cotizan el 16% del sueldo, su edad de retiro es a los 67 años y el pilar solidario representa un 6% del PIB, mientras que en Chile se ahorra el 10% del sueldo, la edad de retiro es de 60 y 65 años para mujeres y hombres respectivamente y el pilar solidario sólo implica el 0,6% del PIB.
Asimismo, Rodríguez aprovecha de criticar los anuncios de Bachelet y adelanta que, de cumplirse, la "clase media trabajadora", aquellos con sueldos entre $ 500.000 y $ 2.000.000, se verán profundamente afectados en el caso de que se valide un aporte extra de un 5% a un sistema de reparto.
Porque para Rodríguez, esta medida se convierte en un impuesto al trabajo que impactará a aquellos que no son lo suficientemente vulnerables para acceder al beneficio, pero cuyo sueldo es menjor al tope imponible, por lo que aportará igual con su 5% a ese fondo.
"Existe consenso en el mundo que un sistema de reparto es inviable en el largo plazo, principalmente por razones demográficas, lo que hará que este monto deba aumentar con el tiempo, imponiendo una carga innecesaria e injusta a las próximas generaciones", explica la carta. Y, según dicen sus afiliados estarían de acuerdo: cerca del 77% de sus afiliados jóvenes prefiere que esta cotización adicional de un 5% vaya a su cuenta de ahorro individual y no a un fondo común solidario", dice el texto.
Finalmente, Habitat responde directamente al gobierno cuando propone que las administradoras devuelvan parte de las comisiones en caso de retornos negativos. Según Rodríguez: ninguna AFP tiene la posibilidad de controlar los movimientos del mercado. Explica que, en el caso de ratificarse esta medida, pasarían a invertir los fondos de pensiones en instrumentos asociados a menor riesgo, implicando menores ahorros acumulados al final de la vida laboral de las personas.
Con esto, la administradora entra de lleno al debate que promete ser el principal tema de la próxima elección presidencial y que, de a poco, comienza a llenar las calles de manifestantes.