La idea surgió mientras esquiaban. En agosto pasado, el empresario y velerista Manuel Urzúa, y el abogado Diego Valenzuela -representante legal de Wenceslao Casares- estaban en La Parva cuando este último le comentó la nueva idea del argentino. "Me dijo que Casares tenía ganas de participar en la Regata de Chiloé. De inmediato me animé a competir", dice Urzúa.  Entusiasmados, llegaron a Santiago a buscar un sponsor. VTR se interesó en auspiciarlos, pero les exigió un bote competitivo para "subirse" a la competencia que parte el 23 de enero. El escogido fue el bote de Nicolás Ibáñez, quien había comprado una nueva nave para este año. El bote de Casares fue bautizado como VTR Almacenero -en honor a su sponsor- y a fines de diciembre fueron a la oficina de Ibáñez para firmar el contrato de arriendo. El team está integrado por 20 veleristas, como Jorge Carey (junior), Ignacio González y el propio Manuel Urzúa. Casares es el capitán de la tripulación.