Un reciente informe de la PDI señaló que en Chile una mujer muere a la semana, agredida por su esposo o conviviente. Para enfrentar esa realidad, el gobierno tiene decidido aplicar mano dura y cambiar las leyes relacionadas con violencia intrafamiliar. En esa línea, el ministro de Justicia, Felipe Bulnes, realizó esta semana un viaje relámpago a España, donde se usa exitosamente el brazalete electrónico en casos de abuso sexual y violencia intrafamiliar: se los ponen a los acusados para monitorear que no se acerquen a sus víctimas. En sus reuniones con las autoridades, Bulnes pudo comprobar los resultados de ese sistema: ha bajado la reincidencia y las agredidas se sienten más seguras. El ministro regresó al país con ésta y otras propuestas en mente, las que podría incluir en el proyecto de ley que modifica el sistema de cumplimiento de penas en libertad, que será presentado en los próximos días.