La idea se venía rumoreando hace un par de días en el campamento Esperanza de la mina San José. Y era que pronto, el Canal del Fútbol (CDF) les enviaría los últimos partidos del torneo nacional a los 33 mineros atrapados para que se entretuvieran y superaran el tedio. La iniciativa se gestó desde la propia estación, que la coordinó con el gobierno. Las razones para hacerlo serían bastante evidentes: además de ser parte de su programa de responsabilidad social empresarial, en el CDF habrían reparado que dentro del grupo de mineros estaba Franklin Lobos, un ex futbolista, varios que participaban de ligas amateur y otros que eran conocidos por la pasión con la que seguían a sus equipos favoritos. Y claro, también habrían considerado el hecho de que el principal jingle del canal ("que no caiga, que no toque el suelo") podía leerse como un mensaje positivo para que no decayera el ánimo de los pirquineros. En coordinación con su corresponsal en Copiapó, el CDF les hizo llegar siete partidos: los dos últimos de Colo Colo, la Universidad de Chile, Cobresal, y el último de la Universidad Católica. El primero en llegar fue el de Colo Colo contra Unión Española, el miércoles pasado en la noche. La forma en que lo hicieron fue mediante un celular Samsung i7410, enviado a través de una paloma, que cumple funciones de proyector y que tendría grabado el partido en su tarjeta de memoria.