El episodio Barrancones -donde la oposición de la sociedad civil fue clave en la decisión del presidente de pedir a Suez Energy que trasladara la construcción de la central termoeléctrica hacia otro lugar- puso de manifiesto el gran poder que han alcanzado las organizaciones ciudadanas en los temas relacionados con medioambiente.

Pero no sólo los megaproyectos energéticos despiertan el rechazo de algunos sectores de la ciudadanía.

En Santiago, por ejemplo, los grandes proyectos urbanísticos, y sobre todo aquellos relacionados con el cambio en el uso de suelo son los que generan el mayor rechazo de los vecinos. Quienes viven en barrios constituidos normalmente por casas, no quieren grandes edificios residenciales o comerciales cerca de sus puertas ni atochamientos en sus calles.

La plataforma Sitio Sur, ligada a la corporación del mismo nombre, reseñó 69 casos de conflictos urbanos importantes que se han vivido en la Región Metropolitana. Muchos de éstos ya fueron resueltos o extinguidos, pero aún quedan varios que prometen polémica y movilizaciones ciudadanas. En la calle o por internet.

Casi todos los conflictos tienen relación con el disgusto de los vecinos ante las modificaciones a las normas para construir edificios en altura, sobre todo en las comunas del sector oriente y San Miguel o en algunos barrios históricos, como Yungay -en el centro de Santiago- o Bellavista -entre Providencia y Recoleta-.

Según el mapa de conflictos urbanos de esta organización, en la Región Metropolitana los focos de diferencias a veces trascienden la discusión con el municipio, concentrándose en empresas constructoras, concesionarias de grandes obras, grandes emisores de ruidos, como pubs o discotheques, terminales de buses o industrias, etc.

Uno de los conflictos más recientes, dada la revisión que hará el Ministerio de Vivienda y Urbanismo del proyecto Portal Bicentenario en la comuna de Cerrillos, es precisamente la demolición del ex aeropuerto Los Cerrillos.

La Federación Aérea de Chile, presidida por Julio Subercaseaux, se ha transformado en la principal opositora a este proyecto argumentando que se destruirá la única alternativa aérea que existe en Santiago.

Otro caso es el del llamado barrio Dalmacia, ubicado en el cuadrante de Miguel Claro y Manuel Montt, Santa Isabel y Emilio Delporte, en Providencia. Un grupo de residentes ha rechazado la construcción de edificios en altura, para mantener el sello residencial y antiguo de sus construcciones.

Similar es el reclamo por el barrio Brasil o Yungay.

En Lo Barnechea, varias juntas de vecinos de La Dehesa se declaran contrarias al Plan Maestro comunal y reclaman por la  falta de conectividad. Una de sus propuestas es construir un túnel por debajo del cerro Alvarado.

El mapa también muestra casos de oposición a construcciones de proyectos urbanísticos, como varias terminales para el Transantiago, o la autopista Vespucio Oriente, que ha logrado, hasta el momento, que el Ministerio de Obras Públicas exija un trazado subterráneo entre la avenida Grecia y Costanera Norte.