Considerado uno de los proyectos emblema de la administración Bachelet, la construcción de la Red de Estadios Bicentenario quedó en stand by una vez que asumió el gobierno de Sebastián Piñera. La postergación de este plan se debió principalmente a la idea del Ejecutivo de redestinar los recursos comprometidos para su ejecución a la construcción de multicanchas en diversas poblaciones.
Pero hoy el panorama ha cambiado. Durante los últimos tres lunes, y en completo hermetismo, el presidente Piñera se ha reunido con el arquitecto Gonzalo Mardones, autor del proyecto Estadios para Chile -iniciativa que pretende transformar estos recintos deportivos en modernos complejos multidisciplinarios al estilo europeo-, para reactivar el plan de modernización de la infraestructura deportiva del país.
Los encuentros se realizan en la oficina del mandatario en La Moneda y han durado aproximadamente tres horas cada uno. A los dos primeros asistieron, además del presidente y el arquitecto, la jefa del Segundo Piso, María Luisa Brahm; el ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac, y el subsecretario de Deportes, Gabriel Ruiz-Tagle. A la reunión del pasado lunes 13 de diciembre se sumó el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, quien tiene como misión asegurar el financiamiento del proyecto.
La elección de Mardones para liderar este proyecto no es antojadiza: desde hace varios años el arquitecto trabaja en esta iniciativa, la cual en su génesis se desarrolló bajo el alero de la Fundación Futuro, presidida en ese entonces por Piñera. Una vez terminado el proyecto fue presentado y donado a la ex presidenta Bachelet y a la ANFP. Piñera y Mardones elaboraron un plan de "Estadios para Chile" en el programa de gobierno. Para eso viajaron a estudiar estos recintos a varios países de Europa.