En la Universidad Católica, Carlos Sierralta era un hombre de la casa. Sin embargo, el geógrafo, magíster en Desarrollo Urbano, y hasta hace dos años profesor del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la UC, persigue un "objetivo" que ronda por los pasillos de esa casa de estudios: monseñor Andrés Arteaga, Vice Gran Canciller de la UC. Sierralta está abocado a que Arteaga -con quienrecuerda haberse cruzado un par de veces durante los 12 años que estuvo ligado a la UC- sea despedido. Lo acusa de ser  protector y cómplice de los abusos cometidos por el sacerdote Fernando Karadima.

Por lo mismo, hoy lidera una campaña en su contra. Todo partió el viernes 18 de febrero, en Twitter, luego de que el geógrafo  publicara la frase "¿Quién me ayudaría a sacar a Arteaga de la UC?". De inmediato recibió apoyo y subió una carta abierta en petitiononline.com dirigida a monseñor Ricardo Ezzati: en cinco días, más de 700 personas -entre estudiantes, profesores y funcionarios de la UC- apoyan la misiva. Ahí, pide su destitución y enfatiza en que Arteaga desestimó los testimonios de las víctimas.