El protagonismo del socio-fundador de LarrainVial, Leonidas Vial, en el rescate financiero de La Polar,  va mucho más allá del mandato del directorio de la multitienda a la corredora de bolsa que él preside.

Vial Echeverría es una de las "víctimas" del descalabro financiero que desde el 9 de junio azota a la tienda por departamentos. "León" Vial, como le dicen sus cercanos, fue el encargado de intermediar $60.000 millones (alrededor US$120 millones) en efectos de comercio (bonos con descuentos) en el mercado apenas seis días antes de que estallara el escándalo. A fines de mayo, el presidente de LarrainVial comenzó a llamar a sus cercanos. La próxima emisión de deuda de La Polar ofrecía una oportunidad imperdible para realizar un buen negocio. Los argumentos de uno de los más avezados actores del mercado financiero chileno eran contundentes. Los efectos de comercio se ofrecerían con altas tasas de retorno y la inminente aprobación de un aumento de capital por US$400 millones volvía más sólida la posición de la empresa, haciendo más atractivos estos instrumentos. Los partners históricos de Vial no lo pensaron: en cuestión de horas el grupo Penta -ligado a Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín-, y el grupo Consorcio -controlado por los clanes Hurtado Vicuña y Fernández León, compraron la mitad de los instrumentos. La seguridad del presidente de LarrainVial era tal que con su patrimonio personal "tomó" $20.000 millones (unos US$ 40 millones) de la colocación. Pero en sólo seis días, se desató la tormenta. El hecho esencial del directorio acusaba "prácticas no autorizadas" y anunciaba la necesidad de provisionar "hasta $200.000 millones". Los involucrados iniciaron una serie de frenéticos llamados telefónicos. Una reunión terminó con el compromiso de Vial de "salvar esta situación a como diera lugar". Desde ese día se abocó de lleno a encontrar un socio para la multitienda, labor que concluyó este miércoles, cuando los accionistas de la compañía aprobaron un aumento de capital por US$ 211 millones.