Desconcertado quedó Francisco Irarrázaval (en la foto) -fundador y ex director de Un Techo para Chile y uno de los creadores del actual programa de campamentos del gobierno- por las duras críticas disparadas por el Capellán de la institución solidaria, Cristián del Campo, contra el accionar del Ministerio de Vivienda en la materia, en la entrevista realizada por Qué Pasa. Por eso, a nombre de los cerca de 60 ex "Techo" que trabajan en el ministerio, se reunió el lunes con Del Campo para aclararle los puntos en que se está trabajando y acercar posiciones.

Para Irarrázaval, uno de los pilares de Piñera en la materia,  la meta en Vivienda es clara: darles una solución en este mandato a las 30 mil familias que viven en campamentos, aun cuando considera inevitable que nuevas familias vuelvan a poblarlos. "Los campamentos son la punta del iceberg. Para terminar con ellos, se tiene que terminar con el déficit habitacional también. Nuestro foco está en sacar a las familias de los campamentos lo antes posible, para que el daño social sea mínimo", asegura.

Para ello confía en los 18 mil subsidios que el presidente destinó para erradicar el problema. "Eso es casi cinco veces lo que se destinó a víctimas del terremoto, y en los próximos años se va a duplicar esa cifra. El 99% de esos proyectos se materializa en menos de un año. Es el triple de lo que gastó el gobierno de Bachelet y es un tercio de los recursos que tenemos disponibles", señala. "Es injusto decir que hay una falta de prioridad".