Las oficinas que el grupo eléctrico CGE arrendaba en el centro de Santiago fueron motivo de rencillas entre las familias controladoras. Mientras los Pérez Cruz abogaban por mantenerlas, el clan Marín defendía la idea de trasladarse a una torre en las cercanías de la rotonda Pérez Zujovic, donde Territoria -de propiedad de Jorge Marín- construiría un proyecto comercial.

Luego del quiebre en el pacto controlador de CGE hace dos meses por diferencias en el manejo del gobierno corporativo, se dio paso a la mudanza. El tradicional logo que colgaba del último piso del edificio de Huérfanos esquina Teatinos desapareció y ahora las gerencias se movieron a la torre Arrau, en Nueva Las Condes. La mudanza durará hasta inicios de octubre.

De todas formas, las ambiciones de una facción de CGE de construir una torre en Vitacura tampoco prosperaron. El terreno que tenían en calle Luz lo acaban de vender al empresario Hernán Guiloff, quien construirá un edificio de oficinas.