Un año intenso ha tenido el Consejo de Autorregulación y Ética Publicitaria, Conar, tribunal privado que zanja las denuncias por malas prácticas en la publicidad. Entre las controversias que la entidad ha debido resolver se encuentra el reclamo de la multitienda Hites, contra ABCDIN por el comercial en donde el imitador Stefan Kramer parodia al animador Rafael Araneda. Según Hites el spot "ridiculiza" a la empresa, ya que Araneda es su rostro principal. Aunque en sus descargos Abcdin dijo que Kramer es propietario intelectual de sus personajes, Conar falló en favor del demandante y dictaminó que el comercial no debía volver a emitirse.
Otro caso que generó amplio debate en el organismo fue la denuncia de la Embajada real de Tailandia contra el aviso de Néctar Cyro de Embotelladora Latinoamericana que mostraba a una madre oriental obligando a su hijo a tomar una sopa de aspecto repugnant. A juicio de la embajada "los telespectadores podrían malentender lo que es Tailandia y la gente tailandesa". Conar rechazó el reclamo, ya que -aunque el idioma usado pueda ser tailandés- el lugar representado era cualquier país asiático y que "se trató de una exageración propiamente publicitaria".
El organismo también se pronunció a favor de la campaña del Sernam contra la violencia a la mujer, luego que un televidente considerara denigrante el término "maricón" utilizado en los spots. El Sernam defendió el éxito de la campaña y argumentó que contaba con el apoyo de representantes de las minorías sexuales.