Más lento de lo esperado ha resultado la venta de la mansión Las Majadas de Pirque, que hasta hoy sigue en manos del millonario argentino Wenceslao Casares. El escaso tiempo que pasa en Chile empujó al empresario a deshacerse de la propiedad, para lo cual contrató en diciembre a la empresa Fitz Roy. Por un monto cercano a los US$ 3 millones, Casares puso la casa en el mercado y, hasta el momento, el pequeño palacio ha recibido unas 20 visitas, pero muy pocas ofertas. De las propuestas recibidas, el fundador de Patagon aún no se decide por ninguna. Casares, dicen quienes lo conocen, quiere encontrar el "comprador correcto", uno que tenga gustos y propósitos similares a los suyos para el inmueble que compró en 2006.