Por quepasa_admin Diciembre 22, 2011

Desde el lunes 19 de diciembre, apenas Rubén Ballesteros fue electo presidente de la Corte Suprema, los llamados de saludos no han parado. Uno de ellos es el de Hernán Levy, presidente de Colo-Colo, quien ha intentado varias veces comunicarse con el ministro, un reconocido hincha del equipo albo.

Ballesteros y Levy se conocieron en un campeonato juvenil de Colo-Colo en el Estadio Monumental, hasta donde el ministro suele ir a ver jugar a su equipo, el mismo que pasa por uno de sus peores momentos: no ganó ningún campeonato y no irá a la Copa Libertadores 2012.

El fanatismo también llevó al juez en 2005, el año en que el club se abrió al mercado, a comprar acciones de Blanco y Negro S.A. No es todo: siempre lleva en su billetera el carné del equipo, donde es el socio Nº A-74094.

De niño, sin embargo, Ballesteros jamás jugó a la pelota. Vivía en Castro, en un casa de palafitos, por lo que su entretención era subirse a los botes. De su lugar de origen, donde aún vive su madre de 99 años, Carmen Dolores Cárcamo, es igualmente fanático. Tanto, que la mayoría de sus lecturas se relacionan con Chiloé. Uno de sus autores favoritos es el historiador Rodolfo Urbina.

Relacionados