La semana pasada se publicó que el párroco de Zapallar, Juan Roberto Julio, había adquirido una camioneta Toyota Land Cruiser Prado 4x4, modelo 2012, cuyo valor fluctúa entre $22 millones y $30 millones. De inmediato comenzaron duros cuestionamientos al sacerdote en las redes sociales. El alcalde Nicolás Cox, quien ha tenido públicas diferencias con el religioso, también cuestionó el vehículo, añadiendo un ingrediente adicional: el vehículo pagará una patente de $805.981. Pero no en Zapallar, sino en Concón.

Feligreses cercanos a la parroquia comentaron que el vehículo no fue comprado con dineros de la parroquia Santa Teresa de Jesús de Zapallar, ni tampoco por el religioso. Un matrimonio amigo del padre Juan, quienes prefirieron mantener el anonimato, decidieron regalar el jeep a la Iglesia.

La pareja, quienes viven permanentemente en las cercanías de Barcelona, en Sant Cugat del Vallés, inicialmente harían la donación a nombre del párroco, pero él prefirió que la hicieran a nombre de la Iglesia. Fueron ellos mismos quienes inscribieron la patente en Concón, explicando ello las dudas que tiene el edil de Zapallar.