Hace dos años, el general Guillermo Ramírez Chovar fue el hombre encargado de poner orden en Concepción, cuando la ciudad estaba en llamas tras el terremoto del 27/F. Tres años antes, había liderado a los equipos del Ejército en la recosntrucción en Tocopilla. Por ello, tras pasar a retiro a fines del 2011, no estaba dispuesto a desaprovechar su experiencia manejando desastres de gran escala.
A principios de enero fundó con otros dos socios Crems-Group, una empresa dedicada a ofrecer gestión de crisis para privados y para gobiernos regionales. "Efectuamos un programa de mejoramiento continuo, que es algo que en Chile no existe, porque la metodología no ha evolucionado en muchos años", comenta el ex uniformado, quien acusa que en el país sólo se apagan incendios y no se establecen marcos sistémicos.
La empresa, que cuenta de 22 personas y la asesoría de varios consultores internacionales en seguridad, nació fruto de los contactos con especialistas que Ramírez consiguió en sus gestiones militares. "Tenemos a gente que ha trabajado en la ONU, en el Congo, Bosnia, Haití, con experiencia en controlar situaciones de catástrofe", agrega.
El servicio consiste primero en realizar una auditoría para establecer las debilidades de la empresa, y luego intervenirla para minimizar desde riesgos financieros y laborales, a desastres naturales o ciberagresiones.