Un doble emplazamiento recibieron en las últimas semanas la panameña Latin Gaming -que opera cuatro casinos en el país- y el superintendente del sector, Francisco Leiva, ante la justicia civil y la Contraloría. El 9 de marzo, el empresario Samuel Olivero denunció que el Casino del Pacífico, en San Antonio, fue certificado como proyecto completo en diciembre de 2010, en circunstancias que a la fecha sigue sin funcionar su  obra complementaria: el hotel de 4 estrellas.

El 29 de marzo,  en tanto, Leiva fue notificado por el 23 Juzgado Civil de Santiago de una demanda de nulidad de derecho público interpuesta por Nuevo Norte Ltda. -ligada a Claudio Quiroz-, acusándolo de otorgar el permiso al Casino Sol Calama en 2006, pese a que su gestora, Latin Gaming, no habría contado con los títulos sobre la totalidad de los terrenos que requería su proyecto.

Leiva respondió que esta última demanda "busca zanjar una disputa entre privados", aludiendo a un juicio anterior entre Nuevo Norte y Latin Gaming.