Pese al éxito de su último periplo, Rodrigo Jordán no quiere volver al Everest. El jefe de la expedición dice que los montañistas chilenos enfrentan serios problemas de seguridad porque ese lugar cuenta con un gran número de escaladores, muchos de ellos sin la preparación necesaria para enfrentar la montaña más grande del planeta.
De vuelta en Chile, los integrantes de su equipo se encuentran en etapa de descanso, pero en un mes más Jordán se reunirá con ellos para analizar sus próximos pasos. Dentro de los proyectos que tiene en mente se encuentra potenciar las expediciones al extremo sur de Chile, específicamente montañas “vírgenes”, que aún no han sido escaladas por nadie.
Pese a que quiere dejar el Everest fuera de sus planes, Jordán quiere mantener expediciones sobre los 8.000 metros de altura en Nepal. Por ejemplo, el Kanchenjunga, tercera montaña más alta del mundo.
Pero hay más: Jordán asegura estar en conversaciones con el subsecretario de Deportes, Gabriel Ruiz-Tagle, y el ministro de Defensa, Andrés Allamand, para promover el senderismo en Chile y fortalecer las unidades de montaña en el ejército. “Allamand me ha dicho que Chile, al ser un país de montaña, debería tener un ejército más especializado en la cordillera”.
Para agosto, sin embargo, ya tiene su plan: partirá a recorrer la costa de Mozambique a pie y en kayak, invitado por la Fundación de Vida Salvaje de Sudáfrica.