Es un indicador al que el gobierno está dando especial atención. Por primera vez la encuesta Casen 2011 incluyó preguntas sobre inclusión financiera. Y el resultado fue que el 42,8% de los chilenos mayores de 18 años cuenta con algún medio de pago. Un dato que indica que aún hay un bajo porcentaje de penetración, sobre todo entre los más pobres.
Las cifras muestran que mientras en el primer quintil el 24,2% de los encuestados tiene algún medio de pago, en el quinto quintil, que tiene el mayor poder adquisitivo, el número sube al 70,8%. A nivel general, el medio con mayor penetración son las tarjetas de crédito de casas comerciales: el 30,3% dice tener alguna. Lo siguen las tarjetas de débito, con 24,7%, y las tarjetas de crédito bancarias, con 11,8%.
Para Sebastián Echeverría, jefe de la División de Cooperación Público-Privada del Ministerio de Desarrollo Social, los datos demuestran la fuerte penetración del retail en los sectores más vulnerables: “Las casas comerciales efectivamente abastecen de servicios financieros a las personas que no pueden acceder a la banca formal, aunque no con la misma variedad y complejidad que las instituciones bancarias”.
Echeverría agrega que Desarrollo Social incluyó el tema de inclusión financiera por considerar que era vital conseguir indicadores de primera fuente de cara a iniciativas como ChileCuenta, que busca entregar los beneficios sociales a través de medios de pago electrónicos. “Es relevante para garantizar que los más pobres tengan acceso adecuado a herramientas financieras que los ayuden y les permitan salir de su condición”, es su conclusión.