La idea se gestó luego de que el diseñador chileno Sebastián Errázuriz -radicado en Nueva York- viera las paredes de las galerías de arte de Chelsea “marcadas” con la línea del agua. Con esto, el artista -cuya oficina está emplazada en Williamsburg, sector que conformó la grey area debido a los cortes de luz que sufrió ese sector- decidió recaudar fondos para las víctimas que dejó el huracán Sandy. Diseñó dos poleras: a una la llamó “I still love New York” (izquierda); y a la otra, “Manhattan Blackout” (derecha). Esta última exhibe la red de metro de la ciudad teñida de negro. Ambas se venden por internet y valen US$40.

La iniciativa ya ha sido recogida por medios locales. The New York Times la destacó el día lunes pasado y también la cadena ABC en el show de Katie Couric.