Los primeros días de enero comienza el rally Dakar y con ello toda su logística, que incluye desde los pilotos hasta los más desconocidos personajes.
Eduardo Perotti, de SurtiRally, el equipo técnico que le presta ayuda a Total en los puntos GPS del Dakar, es uno de ellos. Pero su tarea es especial: cargar los estanques con bencina en pleno desierto.
Con temperaturas cercanas a los 40 grados y etapas de cerca de 700 kilómetros, Perotti cada día debe montar una estación móvil para abastecer a 240 motos y 10 helicópteros: hay una cada 200 kilómetros. No sólo eso. También lleva mil botellas de agua para hidratar a los pilotos.
Y en su rol, los imprevistos son algo habitual. Perotti recuerda que en la edición pasada, se encontraron con dos equipos que llegaron a su punto tras un día y medio de estar perdidos: “Fue el primer lugar al que llegaron. Esa noche cocinamos 15 docenas de huevos duros en agua con un pequeño calentador y recorrimos 150 km para traerles 15 kg de pan, para que pudieran llegar al siguiente campamento a salvo”.