Una exportación chilena para nada tradicional dio a conocer un reportaje de la cadena de noticias alemana Deutsche Welle. Se trata de las típicas arañas pollito de los cerros de Chile y que hoy se han convertido en una de las mascotas favoritas de los niños alemanes. El negocio fue una idea del agrónomo Juan Pablo Orellana, que el 2006 creó en Batuco un criadero de arácnidos y hoy exporta 20 mil de estos animales al año, mayoritariamente a las tierras germanas.
Las vogelspinne o “Rote Chile” -como son llamadas en Alemania- viajan 12 horas en vuelo directo a Frankfurt, donde se comercializan por 30 y hasta 100 euros promedio. Allí han alcanzado fama por ser inofensivas y de fácil cuidado. De clima mediterráneo, deben mantenerse con temperaturas de entre 18 a 25 grados en un terrario de vidrio. Por lo mismo, no existe peligro de que puedan sobrevivir y reproducirse libres en la naturaleza alemana, afectando su ecosistema.
En ese país se han creado agrupaciones, exposiciones, ferias para fanáticos de esos animales y foros en internet para intercambio de información, venta y búsqueda de ejemplares.