La lista de espera de los Fondart corrió  y una de las ganadoras fue Galería Espora: un espacio cultural instalado en la casa que por más de 20 años ocupó el famoso Taller 99, fundado por el pintor y grabador chileno Nemesio Antúnez. En 2010, el taller se trasladó a Providencia y fue Guillermina Antúnez, hija del artista, quien restauró la casa ubicada a los pies del cerro San Cristóbal, en la calle Melchor Concha y Toro 153, para que alguien viviera y trabajara allí. Eso es lo que Paula Cortés, amiga de Guillermina y  directora de Espora, ha hecho desde enero de 2012. La casa aún mantiene su estructura original y ha vuelto a cobrar vida con lanzamientos de libros, exposiciones y talleres. De hecho, el destacado escultor Hugo Marín  y el dramaturgo Alejandro Sieveking exhibieron sus trabajos hace algunos meses. Para impulsar la galería, Cortés -que recibió $ 14 millones del Fondart- ya busca financiamiento privado.