Fernando Moreno (77 años) tiene una colección personal de unos 2.000 cuadros. Sólo en su oficina, en el Instituto de Filosofía de la Universidad Gabriela Mistral, hay unos 30. Sin embargo, entre todas las pinturas, destaca una  imagen del Papa Benedicto XVI cuando todavía era el cardenal Ratzinger . Se la regaló el mismo Papa emérito, como agradecimiento al trabajo que el filósofo hizo para el Vaticano. Mal que mal, fueron 22 años de amistad y colaboración entre ambos, sobre todo cuando Ratzinger fue prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. 

Pero la foto no ha sido el único gesto que el Pontífice alemán ha tenido hacia su amigo chileno. Incluso mientras ejercía el cargo, Ratzinger le enviaba cartas a Moreno con bendiciones y buenos deseos. La última epístola, Moreno la recibió pocos días antes de que el Pontífice renunciara y, según él, si se la lee entre líneas queda de manifiesto el cansancio de Benedicto y su intención de renunciar. En los últimos días, Moreno recibió una invitación para participar, en Roma, de un homenaje privado a Benedicto XVI.