El pasado jueves 12, en visperas del inicio de la apretada agenda de Fiestas Patrias, Sebastián Piñera se tomó un par de horas de relajo e invitó a almorzar a La Moneda a un grupo de viejos amigos con quienes ha mantenido relación durante su vida. Entre los invitados estaban Fabio Valdés, Carlos Eugenio Lavín, Ignacio Pérez, Guillermo Arthur, Jovino Novoa, Edmundo Eluchans, Herman Chadwick, Ramón Salinas, Manuel José Salinas, Andrés Correa Peró, Jaime Bulnes, Rodrigo Pérez Mackenna, Alfonso Ríos, Patricio Claro Matte y Rafael Aldunate, varios de ellos, compañeros de partidas de bridge durante los veranos en Zapallar y Cachagua, y quienes fueron contactados  por la secretaria del presidente.

Tras un cocktail con champán y vino blanco, el presidente invitó al grupo a un veloz recorrido por La Moneda, salpicando su relato con anécdotas de casi todos sus antecesores. 

Antes de pasar al comedor, hubo una sesión de fotos, donde el mandatario, de muy buen humor, continuó con las bromas.

Durante el almuerzo -huevos trufados acompañados por foie gras, congrio colorado a la plancha sobre fettuccine cremosos y, de postre, chirimoyas con helados y rodajas delgadas de mandarina caramelizada- se habló más seriamente de política, temas económicos, internacionales y deportivos, donde Piñera pidió la opinión de sus amigos.