Su vida giró en torno a las pasarelas, hasta que Rosita Parsons decidió dar un vuelco: se transformó en productora. Fue cuando nació Echinuco, una fiesta de la cocina que reúne a expositores de todas las regiones de Chile y que se ha realizado desde 2011 una vez por año. La última, en octubre, costó $250 millones y recibió 35 mil visitas en el Parque Bicentenario.
La idea de la modelo es que varios de los emprendedores que exponen en la feria se conviertan en proveedores de grandes empresas. Es lo que ocurrió con Deli Frost, de María Paz Valdés, y Nativ for Life, de Claudia Guiloff, que ya entregan sus productos a Cencosud. Parsons ya organiza el plan de Echinuco 2014.