“¿Dónde está reunido el equipo de Evelyn?”. Eran las 18:15 del domingo y una sorpresiva visita no lograba dar con los pocos políticos aún congregados: era Arturo Alessandri Besa, el ex candidato presidencial de la derecha que perdió por amplio margen contra Eduardo Frei en 1994. A sus 90 años, llegó por sus propios medios al Hotel Intercontinental, la sede del comando: no había sido invitado y tardó más de 15 minutos en ser reconocido.
A esa hora se abrían las primeras mesas, pero el ambiente era de poca expectación. Sin embargo, el ánimo comenzó a cambiar cuando Gonzalo Cornejo -jefe de programación de la campaña- empezó a transmitir los pronósticos que manejaba. “Bachelet va a estar en torno al 45%”, le repetía a los presentes, en una tendencia que se consolidaría una hora después, a las 19:30.
Después de eso se desató la alegría entre los cerca de 150 asistentes, entre ellos ministros, subsecretarios, jefes de gabinete y asesores de prensa del gobierno. Aunque Jorge Saint-Jean, uno de los jefes del comando, había pedido permiso para que Matthei saliera a hablar ante sus adherentes en calle Vitacura, finalmente se optó por un acto más pequeño en el mismo hotel. Y si bien la candidata estaba lista para salir al escenario a las 21 horas en punto, decidió esperar diez minutos más: su subida estaba coincidiendo con el discurso de Bachelet.