Tras terminar el Rally Dakar, el joven piloto chileno de cuadriciclos Ignacio Casale sólo tenía previsto descansar. Sin embargo, su histórico primer lugar obtenido el sábado pasado en su categoría lo hicieron cambiar de planes. Una serie de compromisos ineludibles con las marcas que lo auspician, entrevistas en medios nacionales e internacionales y una serie de actividades protocolares, como la reunión con el presidente Sebastián Piñera el martes en La Moneda, sorprendieron al joven piloto.
Por ello Casale, quien bajó más de cinco kilos durante el Dakar, tomó una decisión drástica para poder recuperarse física y sicológicamente, y este sábado parte a Punta Cana, sin teléfono, hasta fines de febrero con “prohibición” de subirse a una cuatrimoto. Al volver a Chile continuará sus vacaciones en el Sur, igual de desconectado. Todo, para volver a iniciar sus entrenamientos en marzo, con miras a competir en Europa.