La presidenta Michelle Bachelet invitó a todos sus ministros y sus respectivas parejas a pasar la noche de Año Nuevo al Palacio de Cerro Castillo, en Viña del Mar, cuya gran terraza tiene una vista privilegiada a la bahía de Valparaíso, desde donde se lanzan los tradicionales fuegos artificiales.
Sin embargo, a diferencia de su antecesor Sebastián Piñera, quien varios fines de año invitó a pernoctar a sus secretarios de Estado y amigos en la casona presidencial, la invitación de la presidenta es sin alojamiento.
El más complicado es el canciller Heraldo Muñoz, quien la mañana del 1 de enero -cerca de las siete de la mañana- debe partir junto a Bachelet a la asunción del nuevo período presidencial de Dilma Rousseff.
Una de las alternativas que está barajando la Presidencia es que el jet presidencial de la FACH parta del aeropuerto de Torquemada en Viña del Mar rumbo a Brasilia.