No le avisó a nadie. Ni a sus abogados ni a los directores, ni a sus hombres de confianza. La decisión la tomó solo y en pocos días: dar un paso al costado y dejar la presidencia y la mesa de las cascadas, a través de las cuales controla SQM.
No habían sido semanas gratas para Julio Ponce: hace justo 15 días murió su padre, alguien muy importante en la vida del empresario y con quien tenía una estrecha relación.
Primero preparó una carta con la que anunció su salida, y fue la base para armar el hecho esencial, que se envió el martes pasado a la SVS. La razón que esgrimió: "Motivos personales".
En el mercado hay varias especulaciones respecto a su decisión: la que suena con más fuerza es que el empresario sintió la presión de sus socios y del gobierno que pedían su salida. Desde la Corfo, de hecho, han señalado que el arbitraje que mantienen con SQM no podría llegar a conciliación con Ponce dentro de la compañía. Pero hay más: algunos leen en esta determinación la futura venta de SQM por parte del controlador de la minera no metálica. De hecho, en las últimas semanas ha habido varios oferentes.
Julio Ponce y su silenciosa decisión
En el mercado hay varias especulaciones respecto a su decisión: la que suena con más fuerza es que el empresario sintió la presión de sus socios y del gobierno que pedían su salida.