La novena área silvestre protegida más visitada de Chile está ad portas de cambiar de concesionario. El reconocido Parque Conguillío, en La Araucanía, salió a la venta. Tras cuatro años a cargo, la empresa Sendas decidió enajenar la concesión. El proceso comenzó el 1 de marzo y está a cargo de la firma consultora Fitzroy, ligada a Hernán Passalacqua.
El parque —ubicado a los pies del volcán Llaima y cercano a las termas en Melipeuco y a Corralco— abarca una superficie de 60.000 hectáreas y recibe 80.000 visitantes cada año, el 85% de ellos son chilenos. La enajenación incluye la administración de dos concesiones al interior de Conguillío. La primera, denominada Las Casetas que expira el 2041, incluye una serie de circuitos turísticos, once cabañas que totalizan 53 camas, hot tube, restobar, 20 sitios de camping y dos domos.
La segunda concesión, llamada Playa Curacautín, incorpora una cafetería y un minimarket a orillas del lago Conguillío, 78 sitios de camping, una casa de trabajadores, un refugio de montaña, entre otras instalaciones.
Un hotel podría ser el próximo paso, ya que el concesionario tiene la autorización de Conaf para materializarlo.
Fitzroy ya se ha acercado a todo el mercado local de operadores turísticos y hoteleros para ofrecerles el producto. También ha conversado con operadores internacionales de parques nacionales. El objetivo es cerrar la transacción a mediados de julio.