Terminar con el frenesí legislativo. Esta era una de las principales y reiteradas peticiones de dirigentes oficialistas al gobierno al comienzo del año legislativo. El debate sobre comenzar a acotar la agenda y darle cierre a la “obra gruesa” del proceso reformista tuvo como principal antecedente el discurso presidencial del 21 de mayo. La gratuidad en la educación superior, la reforma laboral, entre otras, dejaron relaciones desgastadas entre La Moneda y el Parlamento.Es por eso que el anuncio del proyecto de matrimonio igualitario sorprendió a varios senadores oficialistas, quienes consideraron, en privado, la inconveniencia de volver a abrir un debate que, inevitablemente, iba a dividir opiniones. Varios de ellos transmitieron el mensaje al gobierno, pero entendieron que se trata de una agenda que concita respaldo popular y optaron por sumarse al debate.
La resistencia oficialista al matrimonio igualitario
El anuncio del proyecto de matrimonio igualitario sorprendió a varios senadores oficialistas, quienes consideraron, en privado, la inconveniencia de volver a abrir un debate que, inevitablemente, iba a dividir opiniones, justo cuando habían convenido con el gobierno el fin del frenesí legislativo.