El cupo que la concejal por Santiago Carolina Lavín (UDI) dejó vacío aún no tiene quién lo llene. Días después de ser ser electa con el 8,69%, ella renunció a asumir para emprender una campaña a diputada por Santiago. Por ello, debió renunciar un año antes de la elección, como lo exige la ley.
El problema —dice ella— es que existe un vacío legal: para renunciar a un cargo primero se debe asumir, pero si Lavín asumía, por plazo no podía ser candidata a parlamentaria. La semana pasada, ante un requerimiento del secretario municipal, el Tribunal Electoral emitió un fallo en el que declaró improcedente la solicitud de decretar vacante su cupo y solicitar una terna para su reemplazo, pero no planteó una solución. El secretario municipal apeló al fallo. “Necesitamos generar jurisprudencia”, dice Lavín.