El único plan que tenía el canciller Heraldo Muñoz para el día 12 de marzo era simple: iniciar sus vacaciones junto a su esposa —que se recupera de una operación a la que fue sometida en enero— en el Caribe.

Pero todo cambió repentinamente. Hace diez días, la Corte Internacional de Justicia de La Haya anunció que el 19 de marzo se iniciarán los alegatos orales por la demanda boliviana.

Ante este escenario, el presidente electo Sebastián Piñera solicitó personalmente a Muñoz viajar a Holanda para asesorar al nuevo canciller, Roberto Ampuero, en lo que serán días decisivos para este proceso que se inició en 2013, durante su primer gobierno.  Muñoz aceptó.

El actual ministro de RR.EE. conoce en detalle los pasos que se han dado en el juicio, información valiosa ante los cambios de agente de los últimos 4 años: la defensa, primero, la encabezó Felipe Bulnes, luego José Miguel Insulza y, actualmente, Claudio Grossman.

Muñoz encabezará, a partir del 17 de febrero, las reuniones en París con el equipo asesor para afinar los últimos detalles de la defensa nacional. Como se sabe, a ellas acudirá Ampuero.