Luz Granier (47) sabía que el momento iba a llegar. Por eso, el pasado lunes 5 de noviembre a la hora de almuerzo, cuando Laurence Golborne recibió el llamado del presidente Sebastián Piñera informándole de que dejaría el Ministerio de Obras Públicas, quien era hasta ese momento su jefa de gabinete asumió que para ella también comenzaba una nueva etapa. Desde ese día, Golborne es candidato a La Moneda, y Granier es la coordinadora general de su comando, su “mano derecha” y una de las personas que más influye en él.

Hoy, sentada en la oficina de la campaña, en un séptimo piso de la calle Burgos, dice que cuando comenzó a ver la sostenida alta evaluación de Golborne en las encuestas y su mención como carta presidencial, no dudó que finalmente asumiría el desafío: “Yo sé que él asume los compromisos, ése es un tema que él ha mostrado a lo largo de toda su vida desde su infancia. Por lo tanto no me cabía duda que esto lo iba a enfrentar”.

Comenta que la mayor diferencia entre su anterior cargo y el actual es la cantidad de gente con la que trabaja. “El Ministerio de Obras Públicas contaba con miles de personas. Tiene 8.700 empleados. Acá somos un equipo chico. Tenemos que ser más multifuncionales, pero también es un trabajo con disponibilidad completa”, dice.

Aunque ha mantenido un bajo perfil, Granier tiene una larga vinculación con la política. Fundadora de RN, hoy dirige una campaña que tiene como rival a la del abanderado de su propio partido, Andrés Allamand. En su primera entrevista política, habla del inicio de la campaña, cuenta cómo ven la primaria de la Alianza y contesta las principales críticas que se le han hecho a Golborne.

-De este primer mes de campaña, ¿qué cosas han sido lo mejor y lo peor?

-Uno siempre es más exigente. Yo, por lo menos, soy más exigente de la cuenta. Me hubiera encantado hacer las cosas más rápido. Pero creo que en este mes y algo que llevamos, hemos avanzado harto. Hemos trabajado en instalarnos, en sumar apoyos. Hemos sumado el apoyo del partido más grande de Chile, la UDI, y de toda su red de dirigentes. Hemos definido nuestro equipo, nuestros ejes programáticos…

-¿Fue más lento porque se tuvieron que instalar?

-Sí, pero eso es parte de las reglas del juego. Nosotros estábamos en el Ministerio de Obras Públicas y dedicados cien por ciento al ministerio. Era un hecho de la causa que partíamos de cero desde el día en que salíamos.

-Andrés Allamand desembarcó con Catalina Parot, tenía una estructura preparada. ¿Eso fue una desventaja para ustedes al comienzo de la campaña?

-Nosotros estábamos en el MOP y en ese minuto Laurence Golborne había sido designado por el presidente para realizar la labor de Obras Públicas. No sé si es algo en contra o a favor, pero acá hay que hacer las cosas para las que uno está encomendado a hacer y no las cosas que te conviene hacer.

-¿Ustedes prefieren trabajar con un equipo más bien reducido en esta primera etapa?

-En esta primera etapa sí. Vamos a ir sumando gente al equipo y vamos a terminar en diciembre del próximo año, sumando a la mayoría de los chilenos.

 

Respetar el estilo

En su rol de coordinadora general, Luz Granier no se despega de su teléfono y de su iPad Mini. Ambos instrumentos le ayudan a planificar y ordenar las tareas a corto y largo plazo que tiene la campaña. A eso le contribuye que tiene una relación de larga data con el candidato: lo acompañó cuando era gerente general en Gener, hace una década, y también trabajó junto a él en los ministerios de Minería y Energía. “Yo me voy a preocupar de que este equipo trabaje en armonía, y de que las decisiones se tomen todos los días basadas en el espíritu y en el estilo de Laurence, aunque el candidato no esté. Lo que hago aquí es representar su estilo en este equipo. Las decisiones tienen que ser lo más cercanas posible a la decisión que él tomaría si estuviera aquí”, dice. 

-¿En qué se refleja eso?

-Si hoy tenemos una reunión de trabajo, él está en terreno y tenemos que tomar decisiones, no podemos trancar las cosas. Tenemos que avanzar. En una campaña y en una actividad política, la decisión es inmediata. Creo que compartimos un mismo criterio en la toma de decisiones. Hemos trabajado juntos muchos años.

-¿Cómo se hace una campaña con un candidato independiente?

-Las campañas a la larga siempre las maneja el equipo de campaña. Contamos con el apoyo de la UDI, pero tenemos la ventaja de que aquí se van a incluir muchos independientes, ya lo están haciendo y eso es un aporte en visiones e ideas.

-Ha habido preocupación de que la campaña tome un tono agresivo. ¿Cuál es su impresión?

-No nos vamos a focalizar en tener una campaña agresiva. Queremos mostrar las fortalezas de Golborne y no destinar nuestra energía y nuestro esfuerzo a destruir al contrincante. Creemos en un estilo de liderazgo distinto. La gente quiere hoy día una cosa distinta, quiere avanzar, y las peleas sólo te llevan a quedarte atrás.

-¿Qué puede ofrecer distinto Golborne a la derecha?

-Es un gran líder, representa una historia de meritocracia que este país valora y necesita. Sabe escuchar a la gente, porque le importa. ¿Por qué Laurence Golborne fue famoso en el tema de los mineros? No fue por rescatarlos. Fue porque estuvo cerca de las familias, porque sintieron que a Laurence le importaban ellos, y que él estaba comprometido de corazón de sacar a esta gente de ahí al fondo. Representa un liderazgo que Chile no se puede farrear.

-¿Qué marca a Golborne como un político diferente?

-Tiene un estilo inclusivo, de oportunidades para todos. Le gusta oír a la gente. Eso es una gran diferencia: los políticos tradicionales están más enfocados en discursear que en escuchar.

-Una de las críticas que le ha hecho Andrés Allamand a Golborne es su inexperiencia política. ¿Cómo se hacen cargo de eso?

-Yo creo que lo importante en esto no es haberse preparado toda la vida, es estar preparado hoy. Y Laurence está preparado hoy para ser presidente de Chile. Somos una misma coalición, aquí no vamos a enfrentar diferencias en ideas fuertes. Estamos en un gobierno, tenemos un proyecto común. Lo que está más en juego en estas primarias es el estilo de liderazgo para llevar adelante este proyecto, y en ese sentido Golborne es una opción ganadora.

-¿Por qué?

-Creo que él tiene una historia que sintoniza mucho con la realidad del Chile actual. Los chilenos fueron los que pusieron a Golborne en esta popularidad, de alguna manera fueron los que lo instalaron como candidato.

 

“Allamand representa un liderazgo antiguo”

Granier destaca con orgullo que es una de las fundadoras de Renovación Nacional. Militante histórica del partido, recuerda que en el año 2000 participó en un grupo de jóvenes profesionales liderados, por el hoy ministro de Defensa, Rodrigo Hinzpeter, y que incluía a figuras que hoy tienen roles destacados en política: “EstabanFelipe Bulnes, Felipe Guevara, la Cata Parot, María Eugenia de la Fuente. Los conozco a todos, yo participé en Unión Nacional, antes de RN”, dice.

-¿A Andrés Allamand desde cuándo lo conoce?

-Desde el 85 para adelante. Y trabajamos juntos en RN.

-¿Por qué opta por Golborne y no por Allamand, que es de su partido?

-No quiero entrar a comparar a los dos candidatos, pero Golborne representa un liderazgo distinto y creo que es lo que va a diferenciar esta elección, Andrés Allamand representa un liderazgo más antiguo, un liderazgo de hace 10 años atrás. Tengo una estupenda impresión de él, pero creo que Chile hoy día necesita un liderazgo distinto.

-Usted es militante del partido. ¿Qué le parecería que RN obligue a sus afiliados a votar por Allamand?

-Yo no he recibido ningún comentario de RN respecto de mi apoyo a Laurence Golborne, y entiendo que tampoco va a haber una obligación de apoyar al candidato proclamado por RN. Por primera vez enfrentamos primarias del sector y por eso hoy día debería haber menos obligación de apoyar al candidato del partido.

-¿Y cómo ve el escenario actual? 

-¡A mí me hubiera encantado que Laurence fuera el candidato de RN! Hubiera estado feliz con eso, pero no lo fue. Pero estoy convencida que vamos a contar con el apoyo de ellos después de las primarias.

-Allamand tiene experiencia en campañas. Para Golborne es su primera campaña. ¿Es una desventaja?

-Andrés Allamand tiene muchas campañas en el cuerpo y Laurence ninguna, pero está preparado para enfrentar esta campaña muy bien. Las campañas son trabajar con la gente, armar equipos. Eso él lo tiene. Es capaz de convocar, de liderar. Y eso es una campaña, no es la chapita. 

-¿Hay algún ataque que les haya molestado?

-No nos vamos a focalizar en los ataques.

-Pero Allamand mencionó a Pablo Zalaquett, que integra el equipo de Golborne, como “el candidato derrotado”. ¿Esas cosas no molestan?

-No son bonitas, pero no hay que perder el tiempo ahí. Nosotros miramos para adelante.

 

La nueva campaña

En las últimas semanas, Granier ha preparado el despliegue de cara a las primarias. “Va a ser mucho más focalizado. Vamos a ir a grupos específicos, a terreno, a llegar a la persona directamente”, es su reflexión. 

-¿Cuál va a ser el programa que va a ofrecer Golborne?

-Tenemos ejes que queremos que la gente conozca: un eje de movilidad social, con una educación de calidad como base central. Otro es lograr que la gente tenga calidad de vida, que sean más felices. Tenemos también un eje de crecimiento y de competitividad. Darle un valor enorme a lo que es el emprendimiento, la innovación.

-¿Cómo lo van a hacer con los temas valóricos? Es algo que ya ha aparecido en la campaña.

-Los temas valóricos están claros, no hay diferencias dentro de la coalición. Hay matices.

-Pero en el caso del AVP se produjo una discusión…

Sí, pero no es un tema que se dé entre partidos. Es transversal. En RN tienes gente a favor y en contra del AVP; en la UDI también. Ahora, Laurence ha definido su posición muy claramente: es partidario del AVP, valora el derecho a la vida y no va a promover una ley de aborto. Hay una base valórica totalmente común en la coalición.  

-¿Y qué le parece el debate que se ha dado?

-Son discusiones que no tienen fondo. No digo que los temas no sean relevantes: estoy diciendo que las diferencias no son relevantes como para subirlas tanto.

 

Bachelet y la UDI

-En caso que ganen la primaria,  lo más probable es que se midan con Michelle Bachelet. ¿Cómo la ve hoy?

-La candidata de la Concertación con el PC tiene una historia de vida basada en lo que a ella le tocó vivir, relacionado con el tema de los derechos humanos, del perdón, de la reconciliación. Eso sintonizaba con el Chile de hace diez años atrás. Es una historia del pasado. Nosotros representamos una historia del futuro, el Chile de hoy, de la meritocracia y de la gente que quiere avanzar.

-Se dice que Golborne es el Bachelet de la derecha.

 

-Tiene atributos de cercanía que pueden ser similares a ella, pero tiene atributos también de liderazgo enorme, otros asociados a su historia de vida, de meritocracia. 

 

-Como alguien que viene de RN, ¿cómo ha sido su experiencia de trabajar junto a la UDI?

-El compromiso con el trabajo en terreno que tienen. es muy potente. Me he sentido acogida por ellos, no he tenido ningún problema en ese sentido, porque estamos trabajando por un mismo objetivo. Además, después de conocer a la UDI, hoy soy más coalicionista que nunca.

-Allamand se ha referido  a Golborne como “el candidato de la UDI”…

-Nos querrán encasillar, pero somos una candidatura inclusiva. Estamos convencidos que para gobernar se requiere mucho más que la UDI y RN: se requiere a los independientes. Entonces, no caigamos en caricaturas.