LA IMAGEN DE LOS EX PRESIDENTES VIVOS

La valoración de los cuatro ex presidentes hoy vivos tiene matices en la ciudadanía. Aylwin y Lagos predominan entre los mayores de 55 años; este último llega, además, a los sectores altos y medios de la sociedad; y Piñera gana entre los jóvenes. Frei, en tanto, sale último.

El jueves 4 de septiembre pasado el ex presidente Patricio Aylwin regresó a La Moneda,  invitado especialmente por la Presidenta Michelle Bachelet a celebrar los 50 años de la elección de Eduardo Frei Montalva. A sus 95 años, el ex mandatario sigue participando en selectas actividades sociales y públicas. La última de ellas en el palacio presidencial había sido la invitación de enero pasado del entonces presidente Sebastián Piñera, para escuchar su opinión sobre el fallo de La Haya que se avecinaba en el diferendo marítimo con Perú.  Pese a esta baja inactividad política, las cifras de la encuesta Plaza Pública Cadem revelan que su imagen sigue siendo potente para los chilenos. De los cuatro últimos ex mandatarios desde el año 1990 en adelante, Patricio Aylwin mantiene un sitial de privilegio en la retina nacional, pues un 58% de los encuestados valora positivamente su figura, aventajando por dos puntos a Ricardo Lagos (56%), en cinco a Sebastián Piñera (53%), mientras que más abajo aparece Eduardo Frei Ruiz-Tagle con un 47%. Es en el segmento de los mayores de 55 años donde el primer mandatario del retorno a la democracia capitaliza su mejor imagen con un 75%, superando a todos sus predecesores. Como contraparte, menos de la mitad de los jóvenes de entre 18 y 34 años (48%) mantiene una buena consideración  de su figura. Al analizar las cifras por estrato socioeconómico, el ex presidente democratacristiano sigue siendo el mejor en los niveles medio (67%) y alto (63%), esquema que no se repite en el nivel bajo, donde no supera el 50% de valoración de su figura. Su buena imagen no se traspasa necesariamente a su gobierno: el 40% cree que  fue bueno o muy bueno, un 32% cree que fue regular, mientras que un 12% lo considera malo.

Tras perder la elección presidencial del 2010, Eduardo Frei Ruiz-Tagle optó por mantener un espacio de influencia en el Senado, en la entonces alicaída Concertación, que después de 20 años en el poder se situaba golpeada en el rol de oposición. El 11 de marzo pasado abandonó el Parlamento y comenzó una especie de exilio político, asumiendo el cargo de embajador extraordinario para Asia-Pacífico. Su última aparición fue el 4 de septiembre pasado. En el Palacio de La Moneda, el gobierno conmemoró los 50 años del triunfo de su padre, Eduardo Frei Montalva. En un sentido discurso, Frei Ruiz-Tagle le dijo a la presidenta Michelle Bachelet que contaba con todo su apoyo en el avance de su gobierno reformista, marcando diferencias con Ricardo Lagos, quien días antes había criticado el manejo político de La Moneda en medio del escenario de desaceleración económica. Éste es el contexto en el que la encuesta Plaza Pública Cadem anticipa que la imagen del ex presidente Frei Ruiz-Tagle es la menos valorada entre los últimos cuatro mandatarios desde 1990. El 47% de los encuestados tiene una imagen positiva del ex gobernante, cifra que lo sitúa inmediatamente bajo sus pares,  convirtiéndose en el peor evaluado.

Muy parecido a lo que ocurre con Aylwin y Lagos, su figura tiene mayor arrastre entre mayores de 55 años (60%) -el único de los segmentos en el que consigue superar al ex presidente Piñera- y en los sectores socioeconómicos medio (54%) y alto (50%).

Así, la imagen presidencial de Frei tiene menos llegada entre los jóvenes (41%) y en los sectores socioeconómicos bajos (41%), siendo estas últimas valoraciones las más bajas entre los ex mandatarios antes mencionados.

Su gobierno de seis años, marcado por el impacto económico de la crisis asiática, también recibe la valoración más baja. De hecho, el 40% de los encuestados considera que su mandato fue regular, mientras que el 29% cree que fue bueno o muy bueno y el 16% lo percibe como malo o muy malo.

“Aquí no hay un problema financiero, aquí falta decisión política”. La mañana del 27 de agosto pasado, el ex presidente Ricardo Lagos soltó la frase en un congreso de Icare, el foro empresarial más grande del país. Lo dijo con vehemencia, y se sintió como si golpeara la mesa. Sus palabras impactaron en el gobierno y en el oficialismo, y fueron leídas como una crítica innecesaria. Otros, celebraron su arremetida. El ex mandatario salía de su silencio voluntario para tomar el protagonismo en momentos en que el gobierno navegaba por aguas turbulentas en materia económica. Lo hacía para demostrar su vigencia. Con la autoridad de quien sabe que cuenta con el beneplácito público. La encuesta de Plaza Pública Cadem le concede, en parte, en el gusto, pues lo sitúa como el segundo ex presidente con mejor imagen (56%), a dos puntos de Patricio Aylwin (58%), siendo los adultos sobre 55 años (68%) y aquellos entre los 35 y 54 años (56%) sus espacios de mayor influencia. Entre los jóvenes, Lagos es aventajado por el ex presidente Piñera por nueve puntos. Su imagen se proyecta con fuerza en sectores socioeconómicos medios y altos (59% en ambos) y disminuye levemente en sectores bajos (52%), aunque la visión cambia con matices cuando se pregunta sobre su gobierno. La diferencia entre quienes consideran que su gobierno fue bueno aumenta en los extremos de los rangos etario y socioeconómico: el 51% de los encuestados de mayor edad valoran el gobierno de Ricardo Lagos, mientras que la misma visión tiene sólo el 29% de los jóvenes entre 18 y 34 años; por otra parte, mientras el 45% de los que pertenecen al rango socioeconómico alto  valoran su gestión, sólo el 34% del segmento más bajo lo considera bueno. Entre los jóvenes, Lagos cede terreno a Piñera, quien alcanza un 43%, aunque tienen la misma evaluación positiva (45%) en el sector socioeconómico alto.

Con la particularidad de que el ex presidente Sebastián Piñera dejó el cargo hace poco más de seis meses, las cifras de la encuesta Plaza Pública Cadem respecto de su imagen y la evaluación de su gobierno presentan dos realidades: si bien la proyección de su figura sólo supera a la del ex mandatario Eduardo Frei Ruiz-Tagle, con un 53% versus un 47% de este último, la evaluación positiva de su gobierno aventaja a la de los otros cuatro gobiernos desde 1990 a la fecha, exceptuando el primer mandato de Michelle Bachelet. Pero la encuesta entrega otro antecedente a considerar: ante la pregunta abierta respecto de quién cree que ha sido el mejor presidente que ha tenido Chile, el 24% de los encuestados menciona espontáneamente a Piñera, quien aparece en segundo lugar, después de Bachelet (37%) y a diez puntos de Ricardo Lagos (14%), y más lejos aún de Patricio Aylwin (10%) y Eduardo Frei Ruiz-Tagle (3%).

Respecto de su figura, el ex presidente de centroderecha marca un predominio en los jóvenes (56%), entre quienes consideran que su gobierno fue bueno o muy bueno, superando a Aylwin, Lagos y Frei Ruiz-Tagle, mientras que se hace fuerte en el segmento socioeconómico medio (62%), donde supera nuevamente a Lagos, aunque este último lo aventaja en el sector alto (59% a 56%).

Si es su gobierno el que se pone bajo la lupa, en este mismo segmento, el alto,  Piñera empata con Lagos y Aylwin (45%), aunque supera a ambos en el estrato socioeconómico bajo (36%). Si bien la evaluación del gobierno de la Alianza no supera al de Lagos y Aylwin entre quienes tienen más de 55 años, definitivamente cuenta con el beneplácito de los tramos menores: jóvenes entre 18 y 34 años(43%), y en el segmento de los 35 a los 54 años (43%).

 

EL PRIMER GOBIERNO DE BACHELET

Es considerada la mejor entre los presidentes que ha tenido Chile (37%). En su primer paso por La Moneda cosecha la mejor imagen de los últimos 50 años (64%) entre los ex mandatarios,  y su gestión recibe la mejor evaluación (59%), según las cifras de Plaza Pública Cadem.

La Presidenta de la República Michelle Bachelet merece un capítulo aparte. No sólo porque es la actual mandataria, sino porque además la evaluación de su figura y su primer periodo en La Moneda, entre los años 2006 y 2010, marca una diferencia abultada con su antecesores desde el retorno de la democracia en 1990.  Sin ir más lejos, cuando la encuesta Plaza Pública Cadem lanza una pregunta abierta sobre quién es el mejor presidente que ha tenido Chile, las respuestas espontáneas en su favor (37%)  le hacen aventajar hasta en  34 puntos a su más lejano ex presidente: Eduardo Frei Ruiz-Tagle (3%).

Cuando se pregunta por su imagen, considerando su primer gobierno, la mandataria supera al resto de sus pares con un 64% de evaluación positiva y 22% de consideraciones negativas.  El predominio de esta opinión se da entre los mayores de 55 años (74%)  -donde  sólo es superada por el ex presidente Patricio Aylwin-, aunque en el tramo de 35 a 54 años y en el segmento más joven  de 18 a 34 años también aventaja a sus pares (63% y 58%). En cambio, si bien en los estratos socioeconómicos bajo y medio supera a sus antecesores (67% y 68%), en el sector alto, donde un 56% dice tener una buena imagen de la mandataria, es superada por Patricio Aylwin (63%) y Ricardo Lagos (59%), empatando en el mismo segmento con Sebastián Piñera (56%).

Por otra parte, es su primer gobierno el que recibe la mejor evaluación de todos, donde el 59% lo considera bueno o muy bueno, un 29% regular y sólo un 8% cree que fue malo. Otro antecedente: en todos los segmentos etarios y socioeconómicos supera a sus antecesores, siendo sus puntos más débiles el respaldo que recibe entre los jóvenes (47%) y el sector socioeconómico alto (51%).

LOS ÚLTIMOS 50 AÑOS EN RETROSPECTIVA

Eduardo Frei Montalva se impone como la figura con mejor evaluación (54%) del periodo desde que asumió la presidencia hasta el retorno de la democracia (1990). Augusto Pinochet obtiene  la más baja valoración, mientras que Allende destaca en sectores populares.

En menos de dos semanas, el gobierno ha dispuesto el Palacio de La Moneda para dos conmemoraciones que marcaron la historia del país: el jueves 4 de septiembre pasado se cumplieron 50 años del triunfo electoral que llevó a Eduardo Frei Montalva a la primera magistratura. Justo una semana después, la presidenta Michelle Bachelet lideró una ceremonia de homenaje para recordar la figura de Salvador Allende, al cumplirse 41 años del golpe de Estado que terminó con su gobierno y marcó el inicio de 17 años bajo el mando del entonces comandante en jefe del Ejército, Augusto Pinochet.

Un contexto propicio para poner bajo observación la imagen y la evaluación del mandato de tres personajes que dirigieron el país en un periodo que marcó la constitución del Chile actual. Las cifras de Plaza Pública Cadem reflejan que la figura de Eduardo Frei Montalva es recordada con especial valoración: con un 54% de evaluación positiva, no sólo supera a Allende (44%) y Pinochet (24%), sino que incluso se impone a los ex mandatarios contemporáneos Sebastián Piñera, y a su hijo, Eduardo Frei Ruiz-Tagle.  La imagen del impulsor de la reforma agraria supera con creces a sus predecesores entre las personas mayores de 55 años (72%), aunque Salvador Allende se impone por dos puntos entre los jóvenes de 18 a 34 años (46% a 44%). Un escenario similar se da al analizar los resultados según estrato socioeconómico: Frei Montalva lidera en los sectores medio y alto (61% y 56%), y empata con Allende en el sector bajo (48%).

Respecto de Augusto Pinochet, quien detenta la evaluación negativa más alta, con un 61%, llama la atención que, aun siendo baja su valoración, cae menos en sectores bajos (27%) que en medios (23%) y altos (22%).

Escenario que es más parejo si es su gobierno el que está bajo evaluación: el 22% del segmento alto considera bueno su mandato, un punto más que el sector bajo. Sólo el 16% de los jóvenes tiene una buena opinión de su gestión, mientras que la mayor valoración la consigue en el segmento entre 35 y 54 años (24%).

Otro dato interesante es que el periodo de Frei Montalva consigue su mejor evaluación en el estrato socioeconómico alto (40%), superando además a Salvador Allende en el estrato bajo (34% a 28%), segmento en el que el líder de la Unidad Popular (UP) consigue la mejor valoración de su paso por La Moneda (28%).