El presidente de Bolivia, Evo Morales, reiteró hoy que la presidenta Michelle Bachelet, durante su primer mandato, le ofreció entregar una porción de territorio con plena soberanía para Bolivia.
En entrevista con radio Biobío, el gobernante dijo que "teníamos delegados personales. La boliviana era la compañera Ana María Campero, que en paz descanse. Viajó varias veces e, inclusive, en uno de ellos con un delegado de Michelle Bachelet sobrevolaron donde sería la posible salida. Y, lamento mucho, después vienen las elecciones y se frustró todo".
"Teníamos mucha confianza, porque juntos decidimos tener delegados para que puedan explorar vías de solución, cumpliendo uno de los 13 puntos acordados con el gobierno de la primera gestión de la compañera Bachelet", agregó Morales.
No es la primera vez que Morales señala esto. En marzo pasado, dijo en el diario La Razón que "inclusive los dos (él y Bachelet) nos propusimos tener delegados que puedan operar (para identificar) dónde y cómo sería la salida al mar”.
En esa oportunidad, el gobierno chileno respondió por vía del vocero Alvaro Elizalde, quien dijo que "jamás, ni durante el primer gobierno de la presidenta Bachelet ni el segundo gobierno, Chile ha propuesto una salida soberana al mar para Bolivia. Jamás, y en eso queremos ser categóricos".
A su turno, el canciller Heraldo Muñoz adujo que "hubo conversaciones entre Bolivia y Chile, pero en el marco estricto del Tratado de Límites de 1904" y rechazó categóricamente el que se hubiera comprometido entregar soberanía.
Arremetida paceña
El presidente Evo Morales y el contingente de juristas que encabezan la demanda, han sacado cuentas alegres de un punto que sí Chile ha hecho un "mea culpa": el posicionamiento internacional de la reclamación por vía diplomática.
Desde que Bolivia presentó su demanda ante el Tribunal de La Haya, Morales ha intentado desplegar su agenda marítima en distintas instancias internacionales (CELAC, OEA, ONU, entre otros), buscando sumar apoyos a su causa y al mismo tiempo, multilateralizándola. En contrapartida, el planteamiento chileno ha apuntado a que el asunto entre ambos es un tema biletaral, que se sustenta sobre los acuerdos vigentes suscritos entre ambos países, y apelando principalmente a la intangibilidad de los tratados, según establece el derecho internacional.
Además de informar que buscaría a la presidenta Michelle Bachelet en la ONU, a donde ambos llegaron para participar de la Asamblea General. Fue en esa misma instancia que Morales dijo que buscaría conversar con la mandataria chilena: "No quisiéramos llegar a que haya un ganador o un perdedor, no quiero, somos países hermanos. Ganemos juntos los dos en términos de integración o económicos (….) Acordemos juntos, todos ganemos, y que no haya un ganador o perdedor, por eso nuestro deseo de ir al diálogo".
INSULZA REBATE A MORALES
El ex secretario general de la OEA, Jose Miguel Insulza, también salió hoy al paso, respecto a declaraciones que el mandatario boliviano realizó cuando estaba al mando de la institución internacional.
Morales recordó en agosto de este año que Insulza aseveró en 2010 que ‘ya es hora de que Chile ofrezca una propuesta concreta a Bolivia en pos de solucionar su centenaria demanda’, el hermano Insulza siempre ha dicho que está con Bolivia, ahora que ya no es secretario general está con algunas dudas, quiero recordarle públicamente los compromisos que tiene conmigo para que Bolivia vuelva al mar con soberanía”.
Frente a esto, Insulza respondió en Tele13 radio que “él (Morales) proyectaba una figura de bastante más simpatía. Lo que pasa es que eligió un camino de confrontación. Y desgraciadamente ocurre eso en los países: cuando los líderes adoptan un camino de confrontación pagan un precio en la simpatía y aceptación que tiene la otra parte y hoy día Evo Morales no tiene el ascendiente político que pudo haber tenido en algunos sectores políticos en Chile. Por eso, tampoco apuntemos con el dedo al que le haya ofrecido algo”.
“Alguna vez yo dije hace un par de años atrás hay que hacerle una propuesta seria a Bolivia, no sigamos diciendo conversemos, conversemos, hagámosle una propuesta seria. Yo no creo que sería el momento de poner esa propuesta sobre la mesa mientras las condiciones políticas no cambien y aquí me refiero a las condiciones políticas de ellos, que desistan de su demanda. Pero si cualquier cosa que digamos va a terminar en la Haya es mejor no pronunciarse”, sentenció.