A diferencia del resto de las oficinas del edificio en calle Miraflores 222, las del numeroso equipo chileno que trabaja en la demanda marítima interpuesta por Bolivia en La Haya —ubicadas en el piso 13— no figuran en el cuadro de la entrada. Ya arriba, las puertas color madera tampoco tienen nombre ni número: sólo un citófono con cámara incluida.
El ex ministro tiene en agenda un próximo viaje a Antofagasta y Arica para comenzar a delinear una idea que tiene en mente junto a la Cancillería: impulsar un plan de infraestructura y de apoyo en la zona norte, en medio de los recientes conflictos con Bolivia y Perú.
Al entrar, un carabinero dice que los teléfonos celulares y grabadoras deben quedar con él.
Desde hace un mes, que la oficina principal —con un gran balcón que mira hacia el oriente de Santiago— la ocupa José Miguel Insulza (72 ), en su calidad de agente de Chile ante la Corte Internacional de Justicia, quien reemplazó a Felipe Bulnes (RN), quien, abrumado por los cuestionamientos de su sector, presentó su renuncia a la presidenta Michelle Bachelet.
El martes, Insulza citó por primera vez a su despacho a los dos coagentes que están a cargo de la defensa chilena: Claudio Grossman y María Teresa Infante, a quienes expuso —en una reunión reservada— parte de su plan. Al día siguiente, se reunió con el canciller Heraldo Muñoz para exponerle sus primeros pasos. Aunque el ministro ha dicho que “juega de memoria” con Insulza, en esa reunión hubo algunos primeros desacuerdos.
Plan norte grande
El ex secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) tiene en agenda un próximo viaje a Antofagasta y Arica para comenzar a delinear un plan que tiene en mente junto a la cancillería: impulsar un reforzamiento territorial en la zona norte, en medio de los conflictos con Bolivia y Perú. Justamente este tema tenía previsto conversarlo este jueves con el senador por la Segunda Región Alejandro Guillier (independiente), quien le propondrá una serie de acciones para reforzar la soberanía en ambas regiones.
Insulza, al igual que otros integrantes de su partido relacionados con el tema internacional, estima que Chile tiene pendiente una política vecinal. Por ello, es partidario de mejorar la infraestructura y servicios que el país ofrece a sus vecinos, como carreteras, puertos y aduanas.
En esta línea, el embajador socialista Ricardo Núñez señala que la política exterior chilena debe ser mucho más proactiva con Argentina, Perú y Bolivia. “Chile debe defender su soberanía, pero entender que tenemos vecinos con los cuales vamos a convivir hasta que el planeta Tierra siga subsistiendo”, dice el embajador chileno en México. “En consecuencia, tenemos que ser capaces de tener una relación más activa y más amigable con nuestros tres vecinos. Y para eso hay que resolver los problemas y buscar los caminos. La imaginación siempre es más rica que la norma fría de los tratados”.
Visita personal a los abogados
En lo inmediato, el ex jefe regional está concentrado en la redacción de la contramemoria a la demanda marítima presentada por Bolivia, que debe ser entregada el 25 de julio de 2016 en el tribunal y que decidió acotar, es decir, hacerla más directa. Esto, tras el fallo adverso que recibiera la defensa dirigida por Bulnes, en el que el tribunal se declaró competente para atender la demanda interpuesta para exigir un diálogo en pos de una salida soberana al Pacífico y que golpeó fuertemente a la Cancillería.
“Estamos trabajando en nuestra contramemoria, que tenemos que presentar antes de julio”, comenta Insulza, quien explica que Bolivia pedirá derecho a réplica, que lo más probable es que se lo concedan, y Chile tendrá derecho a dúplica. “Todo ese proceso ocupará gran parte del 2016 y parte del 2017. Luego vienen las audiencias orales y después el fallo”, agrega.
Fuentes de Cancillería señalan que la contramemoria tendrá una redacción más política y menos judicial que busca explicar a los jueces los acercamientos que han existido entre ambos países, como por ejemplo el de Charaña. También habrá algunos párrafos dedicados a la Guerra del Pacífico.
En enero, Insulza viajará a Holanda para visitar la Corte y presentarse como el nuevo agente chileno. Luego visitará personalmente a los juristas extranjeros contratados por el gobierno chileno: Daniel Bethlehem (inglés), Pierre-Marie Dupuy (francés), Ben Juratowitch (australiano), Harold Koh (estadounidense), Mónica Pinto (argentina) y Samuel Wordsworth (inglés), a quienes les pedirá un borrador sobre la contramemoria, para luego realizar una reunión conjunta en París, a mediados de febrero para redactar un solo documento. Que será afinado en marzo, abril y junio.
Abandonar no es una opción
Insulza resta importancia a las reuniones que ha sostenido Evo Morales con diferentes líderes internacionales, a quienes ha planteado la demanda marítima. Por ello, su estrategia es concentrarse en dos cosas —ganar el juicio y mantener adecuadamente la imagen de Chile en el mundo — y no levantar el tema comunicacionalmente ni caer en provocaciones por parte de Bolivia.
Aunque el plan comunicacional, hoy a cargo del periodista Ascanio Cavallo, no es su tema, su instrucción es “hacer un esfuerzo por disipar en Chile esa imagen de que todo el mundo está pendiente del tema marítimo y que hay países que le están entregando apoyo a Bolivia, porque no es verdad”.
Insulza y sus partidarios en el PS saben que es la primera opción en la eventualidad de que Ricardo Lagos e Isabel Alllende opte por no ser candidatos presidenciales. En la Nueva Mayoría es vox populi que el ex secretario general de la OEA es quien concita el apoyo mayoritario del PS, el PPD y la DC.
En varias reuniones, Insulza ha señalado que la arremetida boliviana hoy no es un tema prioritario para las principales cancillerías del mundo, posturas que ha sido refrendada por las misiones parlamentarias que el Ministerio de RR.EE. ha enviado a Alemania, Inglaterra.“La demanda boliviana contra Chile en Europa no existe. No es un tema que esté en la agenda de ninguna cancillería europea, ni asiática ni africana ni de ninguna parte. En América Latina está, pero en la medida en que los dos países miembros lo plantean”, explica el agente chileno.
Aprovechando sus redes, en este mes el ex ministro ya ha visitado tres países: Estados Unidos, Argentina y Uruguay. Y en Chile se ha reunido con muchos actores políticos, incluidos los que han sido muy críticos a la forma en que Chile ha enfrentado el tema boliviano, como su ex compañero de gabinete en el gobierno de Lagos, Jaime Ravinet, quien es partidario de renunciar ahora a La Haya.
Para el ex ministro abandonar hoy La Haya no es una opción en el juicio con Bolivia.
“Sé que todos los chilenos están detrás de nosotros, pero ojalá estén detrás de la línea que el gobierno está planteando, porque muchas veces se dicen cosas que no ayudan para nada a Chile. Nosotros tenemos que proyectar la imagen de que respetamos la Corte Internacional de Justicia y que estamos litigando ante ella”, comenta.
La apuesta presidencial
La semana pasada, el equipo más cercano a Insulza celebró su regreso —después de muchos años— a la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP), donde ocupó el séptimo lugar entre los políticos con más futuro.
Al ser consultado al respecto, el jefe regional dejó las puertas abiertas para una eventual candidatura presidencial que, de concretarse, lo obligaría a dejar su actual cargo antes del fallo de La Haya. “Siempre he dicho lo mismo: cada día tiene su afán, cada uno haga bien lo que está haciendo y después se verá qué otra cosa se va a hacer”, respondió.
Insulza y sus partidarios en el Partido Socialista saben que es la opción en la eventualidad de que el ex gobernante e Isabel Allende opten por no ser candidatos.
En la Nueva Mayoría es vox populi que si no va Lagos el ex secretario general de la OEA es quien concita el apoyo mayoritario del PS, el PPD y la DC.
Por ello, sus declaraciones no pasaron desapercibidas en el edificio José Miguel Carrera, ya que el propio canciller Heraldo Muñoz ha comentado que, antes de ser nombrado, él personalmente le advirtió que la condición era que se mantuviera en el cargo hasta que terminara el proceso, lo cual Insulza aceptó.
Consultado al respecto, el presidente de Renovación Nacional, Cristián Monckeberg, exige dedicación exclusiva. “José Miguel Insulza no debe estar haciendo guiños a una candidatura presidencial y pensando en la defensa de Chile en La Haya. No puede tener un pie en La Haya y un pie en La Moneda”, señala el diputado, quien cree que si Insulza llegara a irse del cargo de agente afectaría la imagen del país.
En tanto, el presidente de la comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Francisco Chahuán (RN), confía en la palabra empeñada por Insulza: “Supongo que él cumplirá con su compromiso hasta el término del juicio en La Haya. Cambiar nuevamente al agente en medio del proceso tendría un impacto negativo en la defensa chilena”.
“Usar la agencia de La Haya como plataforma electoral me parecería un grave error”, advierte el diputado PPD Jorge Tarud.