Por Víctor Hugo Moreno Diciembre 10, 2015

En estado de profunda reflexión. Así quedó el Partido Comunista (PC)  tras conocer las indicaciones propuestas por el gobierno al Senado en el proyecto de reforma laboral. Los parlamentarios del partido liderado por Guillermo Teillier analizarán en detalle cada letra del articulado, con el fin de asegurar que el reemplazo en huelga sea ciento por ciento efectivo y llevarán su preocupación al comité político de La Moneda del próximo lunes.

Todas estas alarmas se encendieron aún más tras conocer la dura respuesta que dio la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) al rechazar de forma “tajante” las indicaciones del Ejecutivo. Este hecho puede marcar un verdadero punto de inflexión al interior de la colectividad, pues desde que se dio a conocer el proyecto laboral en diciembre del año pasado el partido estaba dividido entre las facciones más oficialistas y las más radicales quienes eran de la idea de que el proyecto debía respetar a raja tabla lo esbozado en el programa de gobierno.

Estas distintas visiones se fueron tornando cada vez más notorias, cuentan al interior del PC, una vez que el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, acuñara los conceptos de gradualidad y luego realismo sin renuncia,  tras su arribo a Teatinos 120. En el PC preocupaba que dicha tesis afectara el corazón de la reforma laboral. Y en ese plano, incluso el considerado más oficialista de los oficialistas, el diputado Teillier, comenzó poco a poco a expresar su preocupación por el devenir de la reforma. Hoy, comentan en el partido, estas aprehensiones ya pasaron a otro nivel, que podría desembocar derechamente en el rechazo del proyecto en caso que pase a comisión mixta, en donde los comunistas sí tienen voz con sus seis parlamentarios, a diferencia del Senado donde no tiene representación.

Aunque la relación con sus socios y La Moneda ha pasado por momentos de tensión, esta vez se trataría de una situación difícil de manejar internamente por la jefatura partidaria. Todo ello, si el gobierno, y en especial Valdés, no ceden y aminoran los cambios presentados este miércoles. Pero, además, la otra barrera para el PC es la Democracia Cristiana (DC), pues ese partido fue clave para la elaboración de las indicaciones, según afirma una fuente del equipo negociador y no estaría dispuesto a ceder lo que logró en los meses de tratativas.

Con todo, en el PC  están  estudiando las indicaciones para ver las acciones a seguir, sobre todo luego de ver la reacción de la CUT. La presidenta, Bárbara Figueroa, señaló en duros términos  que los ministros “han fracasado el día de hoy (…) Los últimos meses hemos enfrentados una discusión compleja en el Senado, donde pareciera ser que el cambio de gabinete pretende, para algunos ministros, transformarse un cambio de giro del gobierno, y donde los sectores más conservadores empiezan a tomar fuerza en el debate”, esgrimió la dirigente en clara alusión al arribo de Valdés.

La paciencia del PC y la CUT parecen haber llegado a su fin ante lo que creen es un retroceso en materia de derechos laborales, sobre todo en el reemplazo en huelga, pues el reacomodo de turnos en base a contratos y las diferentes adecuaciones que puede llevar adelante el empleador en medio de la huelga, a juicio de la gremial y del PC no es otra cosa que un reemplazo encubierto.

 La respuesta de La Moneda

En La Moneda ponen paños fríos.  La ministra del Trabajo, Ximena Rincón, señaló en una entrevista radial que  "aquí no hay reemplazo interno, no se atenúa el fin del reemplazo en huelga”. Por su parte,  desde Palacio, el vocero, Marcelo Díaz, mostró confianza en que aún existe el espacio para el diálogo, con el fin de concretar los acuerdos necesarios al interior de la Nueva Mayoría: “Hemos tenido un largo proceso de diálogo con los parlamentarios  y la CUT  e incluso  con los agentes empresariales, lo que el gobierno ha hecho es presentar un conjunto de indicaciones que dan cuenta de ese dialogo, pero cuando uno presenta indicaciones lo que corresponde es iniciar la discusión en la comisión de trabajo y vamos a estar ahí para ver lo que se resuelva  y procurar los acuerdos que hagan falta. Vamos a mantener  siempre la voluntad  de diálogo, particularmente con la CUT que ha sido un actor relevante en este proceso, porque compartimos un propósito común esencial que Chile requiere una legislación laboral que equilibre las relaciones en la empresa entre empleadores y trabajadores”, expresó.

Bajo ese contexto, en el PC analizarán este fin de semana la situación. Para el diputado Hugo Gutiérrez es “muy preocupante lo expresado por la CUT”. Así, cree que todo se definirá en una comisión mixta: “En el tercer trámite va a ser complejo  votar a favor de algunos artículos que relativicen  el derecho de huelga de los trabajadores”, dijo, agregando que la comisión política del partido que se lleva a cabo los lunes será fundamental para evaluar en detalle las indicaciones presentadas por el gobierno.

En tanto el grupo de asesores técnicos de Trabajo y Hacienda se reunirá este lunes para adelantar el trabajo de la comisión que se llevará a cabo el próximo miércoles en donde podría ser despachado a la sala el proyecto. En esa reunión, se analizarán los avances que existen para lograr la pronta aprobación del texto.

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