Un duro cara a cara fue el primer encuentro que sostuvo el Canciller, Heraldo Muñoz, con los diputados de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, que de forma excepcional no sesionó bajo secreto, como se acostumbra en dicha instancia cuando se tocan temas de estrategia en relaciones internacionales.
Dos fueron los principales flancos de críticas que comenzaron a aflorar de los parlamentarios, en torno a la forma en cómo la Cancillería está llevando esta segunda etapa por el juicio en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), por la demanda de una salida soberana al mar interpuesta por Bolivia. Primero se le pidió a Muñoz que el actual agente José Miguel Insulza aclare de forma tajante que no será candidato presidencial, y que su arribo a la cabeza del equipo jurídico chileno sea un trabajo que se realice hasta el final del juicio que podría extenderse hasta finales de 2017. Además, se criticó el bajo nivel que, a juicio de algunos parlamentarios, han tenido las llamadas misiones de diputados y senadores que han viajado al exterior para dar a conocer la postura nacional ante la demanda paceña.
Las dudas se instalaron luego que el ex secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) apareciera séptimo entre las figuras políticas mejore evaluadas por la ciudadanía según la última encuesta CEP.
Ante dicho escenario, Insulza, quien fue medido por primera vez desde que regresó a la política activa al país a inicios del 2015, dejó abierta la puerta a una opción de postularse a la Presidencia.
El más crítico fue el diputado PPD Jorge Tarud, quien emplazó al canciller a que demuestre que Insulza no tiene pensado ser candidato. “Se hace necesario que el nuevo agente nominado, José Miguel Insulza, descarte ser candidato a cualquier tipo de cargo de elección popular, ya que su actual puesto no puede ser utilizado como plataforma electoral”.
A esta solicitud también se sumó el diputado José Manuel Edwards (RN) quien le dijo a Muñoz que debía entender, que “las cosas son o no son, si no es candidato no veo cuál es problema que él haga una aclaración: sabe que no soy candidato. Porque si a mi me van a pedir que apoye a un candidato de izquierda no lo voy a hacer”. A este emplazamiento también se sumó el diputado Vlado Mirosevic (PL), quien expresó que ciertamente se observaba una “ambigüedad presidencial” en Insulza.
Ante este escenario, el canciller fue enfático en señalar que desde el momento que el "Pánzer" asumió su compromiso, éste iba a ser hasta el final: “Quiero decir en forma clara para despejar cualquiera ambigüedad que en el diálogo que tuve para ofrecerle ser agente del Estado de Chile en nombre de la Presidenta de la República, él me dijo que iba a estar en esta tarea hasta el final, y eso significa hasta que termine el caso. Por lo tanto no nos pasemos películas entre nosotros. El no es candidato presidencial, no lo pretende ser y así me lo ha manifestado y así lo ha dicho públicamente, él ha dicho yo voy a estar hasta el final de este caso”, aclaró de forma tajante el jefe de la diplomacia chilena.
A reglón seguido el diputado Tarud, con tono irónico, lo invitó a mostrar esas supuestas declaraciones de Insulza donde descartaba todo, pues él no las había visto: “no sé en que medio los vio, quizás en alguna prensa especializada que no conozco”, expresó.
Las misiones
El otro de los temas tratados, las misiones parlamentarias también fueron motivo de debate en la comisión. A Tarud, quien calificó como de “bajo nivel” los viajes parlamentarios que se han hecho, principalmente por el nivel de las autoridades locales que han recibido a delegaciones chilenas. También se sumó el diputado Iván Flores (DC), quien dijo que “las giras no han tenido la preparación necesaria respecto a los países a los cuales los parlamentarios han asistido para ver la causa chilena”. Apuntando también sus cuestionamientos al escaso diálogo que hay entre la Cancillería y los grupos interparlamentarios que se han dado en otras instancias más allá de La Haya.
Estas críticas apuntaron en el debate al rol de los embajadores y los agregados de prensa de los países, pues son ellos los encargados de preparar los viajes y coordinar reuniones con autoridades locales. Muñoz tomó en cuenta estas aprehensiones y se comprometió a revisarlas: “Si hay algo que remediar, remediémoslo. Veamos qué embajador no lo ha hecho bien, y bueno corrijámoslo, pero que ha habido acceso a alto nivel, ha habido acceso. Puede que algunas misiones no hayan tenido el acceso necesario y eso hay que corregirlo y hay que enmendarlo. Todo trabajo humano amerita mejoras si es que no ha estado a la altura”, indicó.
Muñoz también anunció que para esta nueva etapa, que en lo comunicacional está liderada por el periodista Ascanio Cavallo, ya se está trabajando en nuevos materiales, que son más breves, y apuntan a establecer las ideas matrices de la posición chilena. Para ello, también se señaló que pronto se darán a conocer vídeos que muestran las demás cosas que se hacen en Chile, para que esto se pueda ver también en el exterior.
Embajador en Perú y Venezuela
El canciller también informó durante la comisión que a solicitud de la presidenta Michelle Bachelet el embajador de Chile en Perú, Roberto Ibarra, que se mantiene en consulta en Santiago, luego del impasse por la creación del distrito La Yarada-Los Palos, volvería a Lima en las próximas semanas, atendiendo el proceso eleccionario que se vivirá en el país del norte.
Y respecto a la situación que vive Venezuela Muñoz aclaró que nunca se ha hablado para que Chile medie en el conflicto interno que vive ese país. "Unasur estuvo disponible en un momento hace casi dos años para facilitar un diálogo, esa disposición siempre está presente, pero para que eso suceda tiene que haber voluntad de las partes", aclaró.