La jefa de prensa de la presidenta Michelle Bachelet, Haydée Rojas, informó esta mañana a los periodistas que cubren habitualmente las actividades del Palacio de La Moneda, sobre un cambio total en la estrategia de medios del gobierno: los cupos para asistir a cubrir los viajes fuera del país con la mandataria ya no serán abiertos, es decir, para todos los medios de comunicación acreditados oficialmente, sino que serán restringidos arbitrariamente. La medida se toma justo cuando la presidenta abandonará el país este martes para asistir a la cumbre de la CELAC en Ecuador, por lo que la nueva política se aplicará previo al viaje siguiente de la mandataria.

La decisión busca controlar el acceso de los medios de comunicación al avión presidencial: hasta ahora asistían prácticamente todos los medios acreditados, con periodista y camarógrafo, e incluso fotógrafos, siendo la única restricción el espacio disponible en la aeronave.

A partir de ahora será el equipo dirigido por Rojas el que decidirá soberanamente qué medios de comunicación y periodistas serán invitados a cubrir las actividades de la presidenta fuera del país, diseño que fue visado por la presidenta Bachelet.

Según explicaron en Palacio se invitará al periodista acreditado y se establecerá un sistema de turnos, dependiendo de cada viaje. También se argumentó que la medida responde a un tema de logística y busca abaratar los costos de cada periplo.

No obstante, la decisión se produce en un complejo momento de la relación entre los periodistas acreditados y la oficina de prensa que dirige Rojas.

Otras fuentes atribuyen la medida a una "pérdida" de la confianza entre el equipo de la presidenta y los periodistas acreditados en La Moneda, pues en las últimas semanas se han producido varios episodios que han molestado a la presidenta Bachelet, entre otros, fotografías de conversaciones privadas en el avión presidencial, así como el "quiebre" del fair play por parte de algunos medios de comunicación sobre conversaciones fuera de micrófono