El 1 de marzo el agente José Miguel Insulza fue claro y enfático ante la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara: “Yo tengo derecho a opinar sobre los temas de la vida nacional”, agregando que esperaba que esa fuera la última vez que tuviera que dar algún tipo de explicaciones por lo que dijera o dejara de decir. Ello luego del emplazamiento que le hiciera la instancia legislativa para que definiera su rol.

Y así ha sido. Desde ese día hasta ahora, el agente ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ) ha continuado una activa agenda paralela de actividades a la de jefe de la defensa chilena ante la demanda por una salida soberana al mar interpuesta por Bolivia. Pero ahora las críticas no sólo apuntaron hacia el solo hecho de hablar, sino al contenido de sus declaraciones. Porque sorpresa causaron tanto en la Nueva Mayoría como en La Moneda sus expresiones emitidas en un seminario de la Universidad Adolfo Ibáñez, en donde manifestó su poca confianza al éxito del proceso constituyente, pues a su juicio tal como estaba concebido no iba a generar los consensos necesarios.

Sin embargo, el pánzer tuvo que moderar sus expresiones y explicarlas rápidamente, pues estaba criticando una parte esencial del proceso que recién esta semana lanzó el gobierno, con cadena nacional incluida de la propia presidenta Michelle Bachelet, con el fin de incentivar a la gente a participar. Las palabras de Insulza apuntaban derechamente a lo contrario, debido a la poca fe que mostró sobre la participación de la gente y a la real influencia que podrían tener los cabildos a la hora de la redacción de una nueva Constitución. Así, en vista del daño que estaba causando a La Moneda esta mañana se retractó, a través de diversos medios de comunicación.

El ministro del Interior Jorge Burgos se enteró por la prensa del retracto del ex canciller, pues al ser consultado al respecto y cuando iba a comenzar a emitir su opinión diciendo que cada uno tenía el derecho a emitir su opinión, un periodista le alertó que ya había dado disculpas por sus dichos. Ante ello, el tono del jefe de gabinete cambió  al decir: “Ah bueno, me parece bien…” Reglón seguido volvió a defender el proceso que se inició esta semana:”Me parece que el Proceso Constituyente y la participación es un elementos súper central y esencial para lo que venga en la etapa democrática  institucional que se discutirá en el Congreso en su momento, es tan importante que haya sentido de participación que le den legitimidad a esa discusión”.  El misnitro finalizó su intervención una vez más agradeciendo el cambio de opinión del agente: “Qué bueno lo que me dicen acá que hubo una aclaración de sus dichos”.

Otro ministro que habló fue el Segpres Nicolás Eyzaguirre, quien además tiene el rol de coordinar el correcto proceso de esta etapa. En entrevista con radio Cooperativa dijo que “no somos un regimiento y José Miguel Insulza es una persona que colabora con el gobierno y tiene todo el derecho a pensar del modo que lo estime. Es una opinión que contribuye al debate, pero la convicción del Gobierno es que esto debe partir por un proceso de consulta ciudadana”.

Las reiteradas reprimendas del Parlamento

Desde el Congreso y especialmente desde las comisiones de relaciones exteriores preocupa que Insulza esté más ocupado de otras actividades que de ser agente. A mediados de marzo se le envió un oficio por escrito a la Cancillería manifestando su preocupación por la firma del agente de una carta de apoyo al ex Presidente de Brasil, Luis Ignacio Lula da Silva, quien enfrenta un proceso judicial en su país. A juicio de la instancia no era prudente que en un caso tan delicado con Bolivia, firme una carta que se refiere a un proceso judicial que se lleva adelante en otro país, pues Insulza es un representante oficial de Chile.

Este hecho ha derivado a que una y otra vez tanto el canciller, Heraldo Muñoz, como el subsecretario, Edgardo Riveros, hayan tenido que ir a dar explicaciones al Congreso a nombre del agente. El diputado PPD Jorge Tarud, quien ha enfrentado duramente al agente en reiteradas ocasiones, volvió a insistir en esta crítica emplazando a La Moneda para que lo llame al orden: “Le hago en consecuencia un nuevo llamado al Gobierno para que le exija a Insulza dedicación exclusiva a La Haya o que de lo contrario dé un paso al costado y, de ser el caso, se nombre a un jurista experto en derecho internacional, puesto que Insulza no lo es”, expresó el parlamentario.

Así también el presidente de la comisión de RR.EE Guillermo Teillier (PC) junto con no compartir los primeros dichos de Insulza sobre el proceso constituyente, le envío un irónico recado: “Espero que en La Haya no se equivoque y que tenga un solo planteamiento”.

Insulza tampoco ha dejado claro qué significa su reiterada frase en torno a que estaría dispuesto a asumir un rol presidencial. Tema que volvió a tratar en otro seminario al cual asistió esta semana en la Universidad de Talca. Insulza al ser consultado por esta posibilidad señaló que “lo que siempre dije en este caso es que estoy disponible. He trabajado toda mi vida en la política y seguiré disponible, por cierto (…) Estoy disponible para lo que considere yo que puedo servir, en estos momentos lo estoy para seguir sirviendo en La Haya y el futuro dirá respecto a otras cosas”.

En la clase magistral que brindó, el ex ministro habló de muchos temas de contingencia, pasando desde la economía hasta el proceso de reformas.

En tanto el canciller Heraldo Muñoz luego de realizar la cuenta pública de su cartera evitó entrar en conflicto frente a esta nueva arremetida del agente opinando respecto a conflictos internos del país: "Yo no voy a pronunciarme a cada rato sobre las opiniones que emita José Miguel Insulza a título ciudadano. No corresponde. No tengo ningún comentario más que hacer sobre la materia".