—¿Qué le responde al senador Allamand, quien dijo en Qué Pasa que usted aparece "para la galería" con el discurso constituyente, pues no organizaría cabildos?
—Yo creo que voy a hacer por lo menos 200 cabildos, pero no lo hago por competir con Allamand. Lo hago porque creo y soy realista políticamente. Lo invito a mis cabildos para que me pueda criticar.
—¿Por qué cree que ha habido tanto rechazo a su postura y la de Felipe Kast en Chile Vamos, de sí participar y armar sus propios cabildos?
—No sé, la verdad es que no la entiendo. Puede ser por falta de experiencia o de olfato político, pero ellos tienen todo el derecho a tener esa posición. Lo importante es que RN, que es un partido político, no una secta, dejó en libertad a las personas que quieren hacerlo. Entonces, eso es lo importante.
—¿Qué le diría a quienes votaron por usted respecto de los cabildos?
—Yo creo que el proceso constituyente es un hecho, el gobierno no lo va a parar y Chile Vamos no tiene el poder político ni el piso para parar nada. Tiene un 19% de aprobación y un 80% de rechazo, por lo tanto aquí el realismo político dice: defendamos nuestros principios y participemos. Fiscalicemos por dentro, denunciemos por dentro si hay algo que no nos parece. Pero no le regalemos la cancha.
En Venezuela, la oposición dijo: "no participamos porque no hay garantías" y los arrasaron. En Chile, la Nueva Mayoría no va a parar a esperarnos a nosotros, de ninguna manera.
—¿Qué opina sobre la propuesta de régimen semipresidencial de su conglomerado?
—No he estudiado en profundidad su propuesta. Hoy Chile tiene problemas mucho más importantes que ese. Cuando lo estudie a él mismo (Allamand) se lo voy a contar, en la cara. Pero hoy día estoy más preocupado de que en Chile gente se muere porque no tiene atención digna, que en Chile la gente tiene grandes diferencias porque la calidad de la educación es muy mala.
—¿Cree que Allamand está a la espera d que lo proclamen candidato presidencial?
—Creo que eso hay que preguntárselo a él ...no sé qué está pensando. Creo que él tiene todo el derecho a ser candidato, y si lo es, feliz. Competimos. Si gana lo apoyamos, pero hay que ganar. Hay que jugar el partido.