En el discurso de la presidenta Michelle Bachelet del 21 de mayo no hubo ningún minuto dedicado a los temas de igualdad de género ni de matrimonio homosexual. No se plantearon plazos ni metas al respecto. Pero desde diversos flancos han caído presiones al gobierno para que se haga cargo del tema, sobre todo considerando que- aunque de forma escueta- en el programa de gobierno se establecieron dos prioridades en la materia: el matrimonio igualitario y la ley de identidad de género.
Respecto al matrimonio igualitario ya se han estado escuchando diferentes voces desde diversos sectores tanto de la Nueva Mayoría como de la oposición, para que el gobierno envíe con prontitud un proyecto de ley que establezca como derecho el matrimonio entre dos personas del mismo sexo. Incluso desde la Democracia Cristiana ya se han abierto a dicha opción. Muestra de ello es el documento que presentarán hoy diputados con el fin de que la Cámara fusione las siete iniciativas que ya existen al respecto. Uno de los firmantes es el diputado DC Matías Walker, quien expresó en declaraciones a La Tercera que: “hay muchos que consideramos que esto tiene que ver con la igual dignidad de la persona y que es un valor el hecho que personas, aunque sean del mismo sexo, puedan comprometerse”.
En esa misma línea en CNN Chile el senador DC Jorge Pizarro dijo que había que legislar sobre un tema que ya es una realidad: “Estamos dispuestos a legislar sobre la materia es conveniente hacerlo, me parece bien que el gobierno envíe un proyecto para debatir en el Congreso. Me parece una cosa razonable. No tengo problemas, es una realizad un hecho, y hay que legislar para que se resguarden los derechos de quienes aspiran a tener matrimonio igualitario”.
En esa misma línea, durante esta jornada los senadores Fulvio Rossi (PS), Guido Girardi (PPD), Ricardo Lagos Weber (PPD) y Alejandro Navarro (MAS) pedirán revisar el proyecto ya ingresado al Senado en 2010 que establece una reforma al Código Civil. Dicho proyecto presenta dos grandes transformaciones. Por un lado, pretende modificar el actual concepto de matrimonio, eliminando las características del precepto vigente respecto a que los contrayentes deban ser un hombre y una mujer, es decir personas de diferentes sexos; además propone eliminar la finalidad de procreación del matrimonio.
Dicha moción parlamentaria se argumenta- según se consigna en el texto ingresado- en que “el actual concepto de matrimonio del Código Civil representa una exclusión arbitraria respecto de una cantidad importante de habitantes, quienes pretenden celebrar el matrimonio pero con personas del mismo sexo, más si consideramos que la propia ley de matrimonio civil reconoce en su Art. 2° que la facultad de contraer matrimonio es un derecho esencial inherente a la persona humana, y no está condicionado al ejercicio de orientación sexual. Asimismo por razones sistemáticas deben efectuarse adecuaciones en la ley de matrimonio civil, así como las otras que resulten necesarias para la adecuada armonía”.
De este modo, sube la presión en el Congreso para que el gobierno se decida y apoye alguna de las iniciativas ya presentadas ante el Parlamento, pues dicha tramitación es de exclusiva competencia del Ejecutivo.
Al respecto el vocero de gobierno, Marcelo Díaz, valoró el interés del Parlamento por legislar sobre esta materia pero no quiso comprometerse a plazos: “El Gobierno tiene un compromiso de enviar un proyecto de ley sobre matrimonio igualitario al Congreso durante el mandato de la Presidente Michelle Bachelet, pero evidentemente sabemos que hay muchas mociones que ya se habían presentado y esto activa el debate”, señaló. Agregó que la iniciativa parlamentaria “va a converger en algún momento” con el compromiso del Ejecutivo, contribuyendo a “que la discusión sea más expedita, así que es una señal positiva de que hay interés por discutirlo, que nos parece importante y es convergente con lo que el Gobierno pretende hacer”.
Identidad de género
Otro de los proyectos relativos a esta materia es sobre la identidad de género. A principios de año La Moneda estableció que esta iniciativa iba a contar con urgencia legislativa. Sin embargo, el texto aún no sortea su primer trámite constitucional: la comisión de Derechos Humanos del Senado. Para acelerar el tranco, el gobierno este miércoles volvió a reactivar su discusión, presentando ante la instancia unas últimas indicaciones, con el fin de que prontamente sea despachado del Senado a la Cámara, y pueda convertirse en ley lo antes posible. El vocero de gobierno, Marcelo Díaz, expuso ante la comisión y explicó el ajuste que el Ejecutivo pretende hacer antes de que sea sometido a votación: “Lo que estamos planteando es una innovación sobre lo que ya se había aprobado en esta comisión y es que para las personas mayores de edad el trámite no tenga lugar ante un tribunal, sino que sea ante el Registro Civil. Porque de lo que estamos hablando acá es del ejercicio de un derecho que tiene hacerse en condiciones de mucho respeto a la dignidad y la privacidad de quienes deciden solicitar el cambio de nombre y sexo para que estén acorde a su identidad de género. Es un proyecto que tiene que ver con derechos”, dijo el ministro desde Valparaíso.
Al respecto el vocero de gobierno, Marcelo Díaz, valoró el interés del Parlamento por legislar sobre esta materia pero no quiso comprometerse a plazos: “El Gobierno tiene un compromiso de enviar un proyecto de ley sobre matrimonio igualitario al Congreso durante el mandato de la Presidente Michelle Bachelet, pero evidentemente sabemos que hay muchas mociones que ya se habían presentado y esto activa el debate”, señaló. Agregó que la iniciativa parlamentaria “va a converger en algún momento” con el compromiso del Ejecutivo, contribuyendo a “que la discusión sea más expedita, así que es una señal positiva de que hay interés por discutirlo, que nos parece importante y es convergente con lo que el Gobierno pretende hacer”.
