En medio de la contienda de los precandidatos presidenciales, Sebastián Piñera continúa a la cabeza de las encuestas, seguido del senador Alejandro Guillier.

Si bien Piñera ha fijado marzo como la fecha para definir su candidatura, en la antesala de esta resolución el ex gobernante afirmó en radio Cooperativa que su familia no vería con los mismos ojos de 2009 una nueva postulación a La Moneda.

Según dijo, "para ser un buen candidato y para ser un buen Presidente, en mi opinión, uno requiere el apoyo total de su familia y yo lo tuve. Mi mujer (Cecilia Morel) me apoyó en forma generosa y, a mi juicio, muy inteligente en 2009".

"Tengo que conversar con mi familia. Lo hemos conversado, pero hasta ahora le puedo decir que mi familia no tiene la misma actitud de apoyo que tuvo en 2009 y para mí es muy importante, si uno quiere ser un buen presidente, un buen candidato, tener el apoyo de la familia. Sin el apoyo de la familia, es muy difícil ser un buen presidente", recalcó.

Foco en inmigración

Una de las banderas que el ex mandatario ha tomado es la idea de expulsar a los extranjeros que cometan delitos en Chile.

En esa línea, explicó que "me opongo, y sería absurdo, ingenuo e incluso estúpido, a que Chile abriera las puertas a aquello que estamos combatiendo dentro de Chile y dejar entrar a Chile personas que sabemos que vienen a delinquir, a cometer delitos de narcotráfico, de trata de personas, sean chilenos o sean extranjeros".

Además, planteó que "la ley que nos rige hasta el día de hoy es de 1975 y está totalmente obsoleta (...) Chile siempre ha sido un país abierto a la inmigración. La inmigración española, la inmigración palestina, la inmigración alemana, la inmigración peruana, la inmigración croata, significaron un enorme aporte a Chile".

"Siento que Chile debe ser un país que acoja con los brazos abiertos a aquellos inmigrantes que vienen a Chile a formar una nueva vida, a respetar nuestras leyes, a integrarse a nuestra sociedad, a aportar al desarrollo de Chile, pero con la misma fuerza creo que Chile sería muy ingenuo y muy poco inteligente si abriera sus puertas a aquello que no queremos que llegue a Chile", agregó.

Finalmente, enfatizó que "no queremos que llegue a Chile el narcotráfico, la trata de personas, el crimen organizado, la inmigración ilegal".