En una entrevista con el diario La Tercera, el ex presidente, Sebastián Piñera, se defendió de las declaraciones expresadas por la presidenta Michelle Bachelet la semana pasada quien dijo que su gobierno hizo las cosas mucho mejor que el anterior en todas las áreas. Piñera refutó duramente a la mandataria: “El 80% de los chilenos piensa que Chile está estancado o retrocediendo, casi lo inverso de lo que pensaba cuando dejamos nuestro gobierno”.
Durante la entrevista criticó las reformas tributaria, laboral y educacional. Respecto a la última, recalcó que no iba a quitarle la gratuidad a ningún estudiante. "Venimos a poner y no a quitar patines, venimos a igualar hacia arriba y no hacia abajo. Pero las reformas tienen fallas estructurales que las vamos a corregir", precisó, Y agregó que es urgente enmendar el rumbo.
"Esta elección presidencial es la más importante desde que recuperamos la democracia, y hay dos caminos: uno es insistir en uno equivocado, que ha generado frustración y estancamiento…el otro camino, que lo representamos nosotros, es corregir los errores, poner a Chile de pie, en marcha”, dijo.
Aunque reconoce que Bachelet tiene buenas intenciones, afirmó que ha hecho un mal gobierno, argumentando que las tres principales reformas tienen el rechazo de la mayoría de los chilenos. "Se partió de un diagnóstico equivocado: creer que todo lo que juntos habíamos hecho desde que recuperamos la democracia había que pasarle una retroexcavadora y eliminarlo desde las raíces fue un error. La ideología de creer que el Estado tiene que ser el gran protagonista y que las personas y la sociedad civil tienen que subordinarse al Estado es otro gran error", explica.
Respecto a la minuta del comando del candidato Alejandro Guiller, en que se señalaba que un gobierno de Sebastián Piñera es un riesgo para Chile, responde: "refleja un error conceptual de la izquierda, la izquierda piensa que ellos son los únicos que tienen legitimidad para gobernar y eso no solamente es profundamente antidemocrático, es una falta de respeto a los ciudadanos".
En relación al tema de la delincuencia, seguridad ciudadana y antiterrorismo, su respuesta es que falta inteligencia y asegura que pondrá filtros más firmes. "Vamos a controlar los antecedentes penales y las personas que han cometido delitos en sus países, que son prófugos de la justicia, no los vamos a dejar entrar. Sí vamos a dejar entrar a los que vengan legalmente a iniciar una nueva vida, a aportar al desarrollo de nuestro país, a integrarse".
Marcó sus diferencias con el candidato José Antonio Kast diciendo que no "es un candidato de nicho", sino que quiere interpretar a una mayoría de chilenos. "No soy una persona de extrema derecha, sino de centroderecha".
