Hubo un tiempo -lo sabemos quienes la seguimos desde el principio- en que Julieta Venegas quiso ser algo así como la Björk mexicana. Craso error, pero nada grave: tanto Aquí como Bueninvento no estaban nada mal, pero algo faltaba, y Venegas subsanó todo con creces apenas dos discos más tarde con Sí (2003), donde destacaban los aires rancheros del megahit "Andar conmigo". Desde entonces, Venegas reforzó la apuesta con Limón y sal (y su "Me voy") y uno de los mejores unplugged en toda la historia del asunto (comprobarlo con la emocionante versión de "Mírame bien"). Otra cosa vuelve a encontrarla en la buena senda (lo mejor para mí es el festivo "Revolución") y arranca con un videoclip que hará historia. Ahí, Venegas aparece (con look y colores muy seventies) sentada como sacerdotisa kitsch y rodeada por bellezas que comen flores y… pedorrean mariposas. No sé si será idea mía -ya conocen mis más perversas obsesiones-, pero creo detectar una suerte de parodia/mensaje de advertencia para Shakira. En cualquier caso, no estará de más atar de pies y de manos y de caderas a la colombiana y sentarla a mirar "Bien o mal" (y el resto de los siempre encomiables videos de la mexicana) para ver si aprende algo. Mientras tanto y hasta entonces, falta menos para que Björk desee ser la Venegas islandesa.
*Escritor argentino